ISBN 0124-0854
N º 129 Febrero de 2007
partidos y fuerzas políticas en lucha por sus propios intereses . Así por ejemplo , en el siglo
XIX , en Francia , Alemania o Italia , cada partido y cada institución relevante tenía su propia prensa . La información , para esa prensa , no era la búsqueda de la verdad , sino ganar espacio y vencer al enemigo particular .
En la segunda mitad del siglo XX , especialmente en estos últimos años , tras el fin de la guerra fría , con la revolución de la electrónica y de la comunicación , el mundo de los negocios descubre de repente que la verdad no es importante , y que ni siquiera la lucha política es importante : que lo que cuenta en la información , es el espectáculo . Y , una vez que hemos creado la informaciónespectáculo , podemos vender esta información en cualquier parte . Cuanto más
espectacular es la información , más dinero podemos ganar con ella .
De esta manera , la información se ha separado de la cultura : ha comenzado a fluctuar en el aire ; quien tenga dinero puede obtenerla , difundirla y ganar más dinero todavía . Por tanto , hoy nos encontramos en una era de la información completamente distinta . En la situación actual , es éste el hecho novedoso .
Y éste es el motivo por el que , de pronto , al frente de los más grandes grupos televisivos encontramos a gente que no tiene nada que ver con el periodismo , que sólo son grandes hombres de negocios , vinculados a grandes bancos o compañías de seguros o cualquier otro ente provisto de mucho dinero . La información ha empezado a ‘ rendir ’ y a rendir a gran velocidad .