ISBN 0124-0854
N º 127 Noviembre de 2006 abrirse campo a los codazos entre esa masa fanática y desesperada , que aquella mañana del 78 copaba el auditorio de la Piloto .
¿ Por qué esta suerte o deferencia con un lugar , que no aparece como una coordenada cultural en mapa alguno ? Empecemos por la respuesta más sencilla : a Borges , como es sabido , le gustaba viajar , una forma de romper sus rutinas de persona confinada por la ceguera a hábitos de hierro , y Colombia le atraía por sentirse seguramente agradecido con su élite cultural que , como sucedió con la revista Mito y la Universidad de los Andes , había roto lanzas por su obra cuando su reconocimiento internacional era casi ninguno .
Quizás también , porque un autor nuestro , Rafael Gutiérrez Girardot , en el año 1959 , adelantándose a todos , publicó un libro sobre él : Borges , un ensayo de interpretación . Además , ¿ por qué no ?, porque también de acá es Juan Gustavo Cobo Borda , quien fue su amigo y escribe artículos , ensayos y libros ,
casi a diario , sobre él , y posee una biblioteca especializada , de más de 800 volúmenes sobre su obra . Esta gratitud , como si no le bastara , lo llevó luego a atribuirle al personaje del cuento “ Ulrike ” el ser profesor de la Universidad de los Andes y a nombrar a Colombia en alguno de sus preciosos poemas , privilegio compartido apenas con unos cuantos lugares de su amorosa cartografía personal .
Y es que en esto del agradecimiento , a diferencia de tantos de sus colegas que a nadie parecen deber nada , Borges era , como en muchas otras cosas , “ un delicado ”, como lo llamó Ciorán . La prueba está en las dedicatorias que hizo a amigas y amigos de sus cuentos y poemas , inmortalizándolos de paso , o introduciéndolos en sus hermosos relatos y haciéndolos partícipes de sus conjeturas y perplejidades metafísicas , como sucedió con Alfonso Reyes , Marta Mosquera , Néstor Ibarra , Emir Rodríguez Monegal , Macedonio Fernández , el pintor Xul Solar , Cansinos Assens o Bioy Casares .