Agenda Cultural UdeA - Año 2006 JULIO | Page 10

ISBN 0124-0854
N º 123 Julio de 2006 de Cézanne no es , por tanto , la vía de la abstracción . Acaso se pueda decir que Cézanne es un pintor orgánico en el sentido que dio Wright a la palabra . Incluso el color no es para él una entidad abstracta o metafórica , sino una auténtica energía natural : “ El color es biológico ; es viviente , es lo único que hace que las cosas sean vivas ”. Fuera del simbolismo , del psicologismo y del abstraccionismo , el color de Cézanne es la vida misma de las cosas circunscritas por el cuadrado del lienzo . Esta es , tal vez , la “ clasicidad moderna ” de Cézanne . Así pues , el color también es forma para el pintor . Es la famosa fórmula de Cézanne : la forma-color . El dibujo “ en sí ” no debe existir : la naturaleza no dibuja . El dibujo se encuentra ya en la plenitud de la forma . Cuanto más el color se precisa , crece y alcanza su armonía , tanto más aparece el dibujo de los objetos , pero aparece en la forma . Por ello , la pintura de Cézanne no puede ser una pintura gráfica o dibujada , sino una pintura plástica , de volúmenes . Esta su exasperada voluntad de “ dar forma ” lo lleva a esa pincelada plana , seca y constructiva que constituye uno de los elementos básicos de su estilo ; lo lleva a simplificar , a condensar . Es sabido que en una de sus cartas más citadas resume su poética de la simplificación de las formas : “ En la naturaleza todo está modelado según tres módulos fundamentales : la esfera , el cono y el cilindro . Es necesario aprender a pintar estas sencillísimas figuras , y luego ya se podrá hacer todo lo que se quiera ”.
Pero , una vez creadas las formas , hay que relacionarlas entre sí , y he aquí el problema de los planos , de su encuentro , de su orden , de su articulación : en suma , la arquitectura del cuadro . Así tocamos otro punto esencial de la invención formal cezanniana , el que acaso haya tenido mayores consecuencias para el arte moderno : el inicio de una nueva solución del problema de la perspectiva . El esfuerzo de Cézanne por captar la forma plástica de las cosas para dar su peso y su sustancia lo impulsaba inexorablemente a mirar los objetos , no ya desde un solo punto de vista , sino desde varios . Sólo así conseguía captar mejor los planos y los volúmenes . De este modo , un mismo objeto en el interior del cuadro yacía en perspectivas diversas que lo deformaban en sentido vertical , longitudinal y hacia abajo , y de igual manera la línea del horizonte perdía a menudo su misma horizontalidad para inclinarse según las exigencias plásticas del cuadro . De este modo de “ ver ” resultaba que , simultáneamente , un objeto tendía a mostrar varios lados de sí mismo , ofreciéndose a una nueva disposición sobre el lienzo , creando proporciones y relaciones distintas de las académicas y tradicionales . Estas “ anomalías ” introducidas por Cézanne en el planteamiento del cuadro llegarán después , en el cubismo , a la destrucción completa de la perspectiva renacentista . Nacía así una nueva dimensión del espacio pictórico , es decir , el sentido de una dimensión que excluía la idea de la distancia , del vacío y de