Agenda Cultural UdeA - Año 2006 ABRIL | Page 38

ISBN 0124-0854
N º 120 Abril de 2006
Goethe llegó a la ciudad de Weimar en el año 1775 , invitado por el duque Carl August , cuya madre , la soberana Anna Amalia , había logrado convertir la pequeña ciudad en el centro cultural de Alemania . Madre e hijo supieron ver el genio en el joven de 25 años , de ahí su premura por ganarlo para la ciudad . El nuevo medio y la nueva situación social en Weimar cambiaron definitivamente la forma de vida del poeta . Goethe se distanció cada vez más de sus años juveniles de Frankfurt , marcados por cierta desmesura , para conquistar el orden y la claridad que caracterizarían su existencia . La casa en el Frauenplan es un signo elocuente de esta conquista : la distribución funcional de los veinte cuartos intercomunicados , el nombre asignado a cada uno de ellos , la aplicación de la teoría del color según el oficio de cada recinto , los muebles diseñados por el mismo Goethe para albergar de modo óptimo diversos objetos , la distribución minuciosa de éstos en vitrinas o gavetas , todo ello es el testimonio de un espíritu disciplinado que se expresa en su ambiente de manera estética .
Goethe vivió en la casa del Frauenplan , construida al estilo barroco , alrededor de cincuenta años , hasta su muerte en 1832 . Este período fue interrumpido tan sólo por sus viajes a Italia , entre 1786 y 1788 y luego entre 1792 y 1793 . Diana : entre 1792 y 1793 estuvo en Italia , un segundo viaje
rapidísimo , según cuenta Alfonso Reyes . ¿ Te parece bien este giro a la frase ? Pero , más que implicar una ausencia , la estadía en Italia pasa a llenar la casa de Goethe . Se revierte tanto en la decoración como en cambios profundos en la estructura de la construcción . El interés del poeta por la Antigüedad y el Renacimiento empieza a mostrarse desde la entrada interior de la casa . Ésta fue tranformada por Goethe al estilo de los palacios renacentistas , con una escalera amplia y luminosa , a cuyo principio y final se encuentran réplicas de estatuas antiguas . La escalera conduce a la puerta del Salón amarillo . Ante su dintel , como primer saludo a los visitantes , Goethe dispuso la incrustación en madera de la palabra “ Salve ”. También el Cuarto del puente implicó una transformación en la estructura , en la línea del ideal romano con su techo abovedado ; allí Goethe exhibía objetos artísticos , especialmente réplicas de bustos , y guardaba monedas , medallas , gráficas y alrededor de 2.000 dibujos propios .
El Salón amarillo , amplio y decorado también en remembranza de los viajes a Italia , cumplía la función de comedor para invitados . Su color obedece a la teoría de Goethe , que examina los efectos de los diversos colores en el ánimo y la moralidad . Al amarillo le atribuye el poder de despertar la vivacidad , sostener la atención interesada y estimular la sociabilidad . Transmite una calidez inmediata , por la cual el ojo se regocija , el corazón se