Agenda Cultural UdeA - Año 2005 ABRIL | Page 16

ISBN 0124-0854
N º 109 Abril 2005 preguntan, como acostumbran, ¿ con qué derecho reclamas el sepulcro?, no les contestes nada, que ya lo verán luego. Luego... tal vez cuando tú ni ellos existáis ya, por lo menos en este mundo de las apariencias. y esta santa cruzada lleva una gran ventaja a aquellas otras santas cruzadas de que alboreó una nueva vida en este viejo mundo. Aquellos ardientes cruzados sabían dónde estaba el sepulcro de Cristo, dónde se decía que estaba, mientras que nuestros cruzados no sabrán dónde está el sepulcro de de afrontar el ridículo. El ridículo es el arma que manejan todos los miserables, bachilleres, barberos, curas, canónigos, y duques que guardan escondido el sepulcro del Caballero de la Locura. Caballero que hizo reír a todo el mundo, pero que nunca soltó un chiste. Tenía el alma demasiado grande para parir chistes. Hizo reír con su seriedad. Empieza, pues, amigo, a hacer de Pedro el Ermitaño y llama a las gentes a que se te unan, se nos unan, y vayamos todos a rescatar ese sepulcro que no sabemos dónde está. La cruzada misma nos
Don Quijote. Hay que buscarlo peleando por rescatarlo. Tu locura quijotesca te ha llevado más de una vez a hablarme del quijotismo como de una nueva religión. Y a eso he de decirte que esa nueva religión que propones y de que me hablas, si llegara a cuajar, tendría dos singulares preeminencias. La una, que su fundador, su profeta, Don Quijote-no Cervantes, por supuesto-, no estamos seguros de que fuese un hombre real, de carne y hueso, sino que más bien sospechamos que fue una pura ficción. Y su otra preeminencia, sería la de que ese profeta era un profeta ridículo, que fue la befa y el escarnio de las gentes. Es el valor que más falta nos hace: el
revelará el sagrado lugar. Verás cómo, así que el sagrado escuadrón se ponga en marcha, aparecerá en el cielo una estrella nueva, sólo visible para los cruzados, una estrella refulgente y sonora, que cantará un canto nuevo en esta larga noche que nos envuelve, y la estrella se pondrá en marcha en cuanto se ponga en marcha el escuadrón de los cruzados, y cuando hayan vencido en su cruzada, o cuando hayan sucumbido todos- que es acaso la manera única de vencer de veras-, la estrella caerá del cielo, y en el sitio donde caiga, allí está el sepulcro. El sepulcro está donde muera el escuadrón. y allí donde está el sepulcro, allí está la cuna, allí está el