Agenda Cultural UdeA - Año 2003 SEPTIEMBRE | Page 9

ISBN 0124-0854
N º 86 Febrero 2003
De una generación a otra: tres promociones- un mismo destino
La literatura latinoamericana llega al nuevo siglo con una diversidad de propuestas que desde los 80 muestra la confluencia de varias promociones de escritores de diversas edades, cuyas tendencias no corresponden única y necesariamente a las convencionales nociones de generación. Esa diversidad muestra cambios de perspectiva, de sensibilidad y de estética, lo que en el caso colombiano puede ser definido como " un largo adiós a Macondo ", correspondiente a lo que en otros de nuestros países significó la despedida del boom narrativo de los 60. El balance se concreta en una literatura más a tono con la complejidad urbana, ausencia de todo ruralismo y realismo mágico, mítico y maravilloso, y las edades de sus autores oscilan entre los veinticinco y los cuarenta años( si pensamos en los más jóvenes) y alrededor de los cuarenta y cinco y sesenta, en el caso de los mayores, y en el de las narradoras es frecuente que estén sobre los cuarenta o cincuenta, demostrando su llegada tardía a una narrativa sistemática.
Si la generación o promoción surgida desde fines de los 70 mostró afán de ruptura de los
códigos impuestos por el canon generado con el boom narrativo, las nuevas promociones no muestran conflicto ante ningún pasado ni autor ejemplar. Buscando autonomía los de los 70 se distanciaron de sus inmediatos antecesores proponiendo un lenguaje que en varios casos se afirmó en lo experimental y lo contestatario, los problemas urbanos y los conflictos de su presente, dando cuenta de la crisis de valores, de la fatiga del mundo literario y de las formas establecidas. Los jóvenes de hoy, pertenecientes a una cultura polivalente en la que la informática y la comunicación ha fundamentado su formación y su relación con el mundo, sin rendir tributo a la tradición, romper con antecesores inmediatos, o asumir actitudes críticas ante la historia de su país o de su tiempo se reconocen contemporáneos, expresando su presente, el diálogo con diversos lenguajes y el afán de crear historias propias de la vida cotidiana, demostrando que su país forma parte de la llamada aldea global. Si la que en otras ocasiones hemos llamado generación de la ruptura, se distingue por sus discursos y escrituras que proponen la crisis a lo establecido mediante el aprovechamiento de la risa, la ironía, el erotismo, la irreverencia y en ocasiones la diatriba contra el discurso oficial, entre la más reciente, que alguna vez y provisionalmente