Agenda Cultural UdeA - Año 2003 FEBRERO | Page 5

ISBN 0124-0854
N º 86 Febrero 2003
estaban en necesidad, al establecer orfanatos, hospitales y asilos para los ciegos y los viejos. En 787 d. C., Datheus, arzobispo de Milán, fundó el primer asilo para infantes abandonados. " En cuanto el niño sea expuesto en la puerta de la iglesia ", él escribió, " se recibirá en el hospital y se confiará al cuidado de aquellos a quienes se les paga por cuidarlos ". Sin embargo, las condiciones de las tales instituciones eran precarias, y la mayoría de los niños no sobrevivía.
Cuando la lepra comenzó a desaparecer después de las Cruzadas( 1100- 1300). se destinaron las restantes colonias-o leprosarios- a otros usos.
La Edad Media estuvo dominada por la idea de Dios. La noción de que las personas con discapacidades eran " niños de un Dios afectuoso "( Les enfants du Bon Dieu) era algo prevaleciente. La percepción de " niños de Dios " se refleja también en las escrituras del Corán ", Confucio-, y Zoroastro ". Las personas con discapacidades eran consideradas " diferentes "; ninguno era considerado normal.
Durante la Edad Media, la Iglesia Católica Romana proporcionó refugio a aquéllos que
Estos establecimientos estuvieron pronto llenos con todos los tipos de personas no convencionales: huérfanos, vagabundos, dementes, enfermos incurables, prostitutas, viudas y delincuentes. Estas " ciudades de condenados " poseían ' autoridad, dirección, administración, comercio, policía, jurisdicción, corrección y castigo ', y tenían a su disposición estacas, hierros, prisiones y calabozos." Después, en 1657, fueron establecidas dos nuevas instalaciones en Francia: el Salpetriere, que alojaba a 1.416 mujeres y niños; y el Bicetre, que mantenía a 1.615 hombres. Durante ese tiempo, las " jaulas de idiotas " se hicieron algo común en los centros de los pueblos " para mantener fuera de problemas a las personas con discapacidades ", aunque pueden también haber servido simplemente como