Agenda Cultural UdeA - Año 2002 NOVIEMBRE | Page 8

ISBN 0124-0854
N º 84 Noviembre de 2002 hicimos en naciones y tribus, y ustedes pueden conocerse mutuamente”. Confucio insistió a sus seguidores en que: " Cuando el buen camino prevalece en el Estado, habla audazmente y actúa audazmente. Cuando el Estado ha perdido el camino, actúa audazmente y habla suavemente”. En la tradición judía, la orden de " amar a tu vecino como a ti mismo ", se considera como el mismo centro de la Torah.
Este pensamiento se refleja en el evangelio cristiano, que también nos enseña a amar a nuestros enemigos y a orar por aquellos que desean perseguirnos. A los hindúes se les enseña que“ la verdad es una, las sagas le dan varios nombres." Y en la tradición budista se insta a los individuos a que actúen con compasión en cada faceta de su vida.
Cada uno de nosotros tiene el derecho de enorgullecerse de la fe o herencia particulares. Pero la noción de que lo que es nuestro necesariamente está en conflicto con lo que es de otros es falsa y peligrosa. Ha producido interminables enemistades y conflictos, y ha llevado a los hombres a cometer los más grandes crímenes en nombre de un poder superior.
No es necesario que sea así. Personas de diferentes religiones y culturas viven lado a lado en casi cualquier parte del mundo, y la mayoría de nosotros tiene identidades superpuestas que nos unen con grupos muy
diferentes. Nosotros podemos amar lo que somos, sin odiar lo que no somos. Podemos crecer en nuestra propia tradición, y aun así aprender de otros y respetar sus enseñanzas.
Esto no será posible, sin embargo, sin libertad de religión, de expresión, de asociación e igualdad básica bajo la ley. De hecho, la lección del último siglo ha sido que donde la dignidad del individuo se pisotea o se amenaza( donde los ciudadanos no disfrutan del derecho básico de escoger a su gobierno, o el derecho de cambiarlo regularmente), el conflicto se presenta a continuación, con civiles inocentes que pagan el precio en vidas segadas y comunidades destruidas.
Los obstáculos a la democracia tienen poco que ver con la cultura o la religión, y mucho que ver con el deseo de aquellos que quieren mantener su posición a cualquier precio. Éste no es un nuevo fenómeno, ni limitado a una parte particular del mundo. Las personas de todas las culturas valoran su libertad de elección, y sienten la necesidad de tener una voz en la toma de decisiones que afectan sus vidas.
Las Naciones Unidas, cuya lista de miembros comprende a casi todos los Estados en el mundo, se funda sobre el principio de que cada ser humano tiene igual valor. Es lo más cercano que nosotros tenemos a una institución representativa