Agenda Cultural UdeA - Año 2002 JUNIO | Page 16

ISBN 0124-0854
N º 79 Junio de 2002
Más hombría para el dios – macho Probablemente las prácticas adicionales homosexuales se volvieron parte del culto politeísta como sucesoras de la masturbación. La evidencia sugiere que, para facilitar la masturbación, los sacerdotes paganos estimulaban oralmente a los fieles en los cultos antiguos del Oriente Medio. Si uno creía que al tener sexo con un dios se atraía la fertilidad, era fácil también creer que, si un hombre aportaba su propia masculinidad a un dios varón – a través de su semen –, la fertilidad se multiplicaría aún más; a esto habría que acotar que los dioses masculinos eran quienes plantaban las semillas y, por lo tanto, algunas personas los veían como más productivos que las diosas. Cuando un hombre penetraba a otro hombre en el altar, al verter su semen agregaba más poder masculino a los dioses. Así, con la fuerza adicional generada por la semilla de muchos hombres, el dios podría asegurar una cosecha dadivosa, una manada mayor y muchos niños para cuidar el campo.
Esta práctica no sólo formaba parte del culto pagano, sino que también era un medio de ganar dinero para el templo. Los catamitas – muchachos y hombres que eran usados exclusivamente para el sexo
anal pasivo – empezaron a servir en los templos. Uno debe preguntarse si a veces estos muchachos eran forzados a este tipo de contacto sexual por las circunstancias económicas, igual que sus colegas femeninas. Las mujeres a menudo sólo podían sobrevivir gracias a la prostitución, dado que no se les permitía tener ninguna herencia; los muchachos huérfanos pueden haberse encontrado en la misma encrucijada. En todo caso, desde una fecha muy temprana en la historia humana, se usó la prostitución masculina y femenina tanto para colectar fondos para el culto, como para garantizar la subsistencia individual.
Homosexualidad en la Grecia antigua A menudo, a la cultura griega se le promueve como la cultura que más ha aceptado la homosexualidad. Hasta cierto punto esto puede ser cierto. Los griegos desarrollaron una actitud hedonística hacia el cuerpo humano y la sexualidad. Aunque nosotros podemos pensar hoy que el hedonismo es lujurioso, los filósofos griegos escribieron del hedonismo en términos mucho más entusiastas. Ellos creían que el cuerpo humano desnudo, tanto el de los
Fotografía de Antonio Betancur
varones como el de las hembras, era algo digno de respeto y admiración. Se enorgullecían de la forma física. La desnudez pública era no sólo tolerada, sino a menudo fomentada.
El arte y la estatuaria de los gri egos antiguos reflejan este amor por el cuerpo, particularmente por el cuerpo masculino. Un rasgo negativo de esta actitud es que aquellos niños que estaban impedidos o eran poco atractivos, a menudo eran abandonados para que murieran y se ofrecían en sacrificio a un dios 1. No era raro que los hombres hiciesen un comentario sobre el atractivo de otros hombres, o que expresaran afecto entre ellos. Al menos parte de la razón de esta fascinación con el atractivo físico y el sexo es
1 Como ejemplo está el mito de Hefestos, dios
del fuego y la forja, y primogénito de la diosa Hera, esposa de Zeus. Justo después del nacimiento fue arrojado del monte Olimpo por su madre y cayó en el mar, lo que le ocasionó una cojera permanente. La razón del rechazo materno simplemente fue que Hefestos era muy feo y su madre temió que los demás dioses se burlaran de ella... Habría que agregar que Hefestos terminó casado con Afrodita, diosa del amor, aunque el matrimonio distó mucho de ser dichoso.( Nota del editor)