Agenda Cultural UdeA - Año 2002 FEBRERO | Page 11

ISBN 0124-0854
N º 75 Febrero de 2002
Rossum ”, donde nosotros no encontramos propietarios y obreros sino hombres de negocios y robots . De hecho , fue de la obra de Capek , de R . U . R ., de donde la palabra robot entró en el idioma inglés por primera vez ; una palabra que luego se hizo aún más expresiva en la maravillosa colección de cuentos Yo , el Robot , del escritor norteamericano de ciencia ficción Isaac Asimov . Un carácter en R . U . R . observaba que :
“ En 10 años los Robots Universales Rossum producirán tanto maíz , tanta tela , tanto todo , que las cosas prácticamente no tendrán costo . No habrá pobreza . Todo el trabajo será hecho por máquinas vivientes . Todos estaremos libres de preocupaciones y nos liberaremos de la degradación del trabajo . Todos viviremos únicamente para perfeccionarnos .”
Bien , allí lo tienen . Un sueño utópico cristiano – marxista – socialista – colectivista – comunista vuelto realidad . El hombre se libra del pecado original ; es liberado del trabajo tedioso y del reino de la necesidad para buscar sus propias metas de creatividad y perfección . Como valor adicional todo esto será logrado por el hombre para el hombre ; en esta tierra , no en alguna agustiniana ciudad de Dios . Por supuesto , la
moraleja es tan clara como el eventual resultado : cuando los hombres se vuelven dioses y controlan su propio destino , sus creaciones se vuelven para destruirlos . Éste es el destino que sufrirán aquellos que crearon Robots Universales Rossum .
A este poco prometedor retrato , podemos agregar fácilmente la película de 1936 Tiempos Modernos de Charlie Chaplin ( 1899 – 1977 ). En guisa de parodia , sátira y bofetada , Chaplin retrata una civilización de la máquina que se ha vuelto loca , literalmente , con la velocidad y la eficacia . Subtitulada " Una historia industrial ", la película comienza con un reloj que llena la pantalla . Esta imagen es seguida por una manada de ganado en estampida . La conexión está completa : tiempo y velocidad son las palabras claves de los tiempos modernos . Aunque Tiempos Modernos fue la última película muda de larga duración hecha en los Estados Unidos , de hecho oímos algunas palabras ; sin embargo , las voces humanas parecen hostiles a la vida : son inhumanas . Las palabras son órdenes para lograr una eficacia industrial aún mayor a expensas de la salud mental y física del obrero . En la película , las primeras palabras en ser oídas vienen del dueño de la " Compañía Electro – Acero ", quién aparece en una
pantalla de video y ordena " Más velocidad " de la línea de ensamblaje ”. Su segunda alocución no difiere de la primera , simplemente ordena : " Sección cinco acelere más , cuatro , siete ". Más tarde en la película , pide al hombre encargado de las velocidades de la línea de ensamblaje "¡ Dele hasta el límite !". El vagabundo , interpretado por Chaplin sufre el efecto de la " Forditis avanzada " y es superado por la velocidad de la línea de ensamblaje sobre la que él aprieta las tuercas : todo se enloquece .
De esto mucho se ha hablado ; hay ahora algo de tradición , tanto en la escritura utópica como de la distópica . La tradición entera de la distopía , una tradición nacida entre los años 20 y 30 – lo que espero les diga algo – encuentra a su portavoz más elocuente en la novela 1984 de George Orwell ( 1903 – 1950 ). Como una distopía , 1984 de Orwell permanece como un monumento tanto a la histeria como a la calmada introspección , esto es , si semejante cosa puede imaginarse . Dentro de ella se encarnan el mito y la realidad , y estoy bastante seguro de que permanecerá por un largo rato como un hito regular en todos los cursos de literatura del siglo XX .