Agenda Cultural UdeA - Año 2001 AGOSTO | Page 18

ISBN 0124-0854
N º 70 Agosto de 2001
Lo que sí ha sido una constante ha sido nuestra insuperable agresividad. Desde hace un siglo sabemos que existieron diversas especies prehumanas, como el Homo Erectus, el Homo Habilis, el Hombre de Cromagnon y el Hombre de Neandertal. Durante varias décadas se ha considerado que desaparecieron simplemente por falta de adaptación, que la línea humana era sólo una y que se fue modificando hasta finalmente llegar al Homo Sapiens. Pero los rastros de dientes humanos en algunos restos descubiertos recientemente han puesto sobre el tapete esta creencia: aparentemente nuestros parientes prehumanos no sólo desaparecieron por su desadaptación al cambio de las condiciones naturales, sino que también las especies prehumanas más avanzadas cazaban a las menos desarrolladas. Es decir, que literalmente nos comimos a nuestros ancestros hasta extinguirlos. los recursos naturales. Pero ¿ qué sucede si una especie tan agresiva como la nuestra decide establecerse en ciudades? Obviamente los lazos interpersonales se debilitan y se hacen frecuentes los conflictos internos.
En una ciudad donde conviven miles de habitantes, ninguno es del todo imprescindible y existe un cierto anonimato que resulta imposible en una pequeña comunidad, por lo que no es impensable llegar al asesinato para conseguir lo que el otro tiene y se desea; además, en una ciudad los deberes se hacen confusos pues las tareas se multiplican: ya no basta simplemente con que los hombres se dediquen a cazar y las mujeres a la recolección. Sin embargo, es necesario establecerse en ciudades, pues ya las
La ley es al mismo tiempo una utopía y una
necesidad
otras tribus se han organizado, y si la comunidad se dividiese, las demás la aplastarían por su número. Es necesario inventar algo que permita convivir, unas normas claras de organización que permitan a la ciudad funcionar sin caer en la anarquía y defenderse de la agresión de otras comunidades. Surge entonces la Ley.
El código legal escrito más antiguo que se conoce es el Código de Hammurabi, quien reinó en Babilonia de 1795 a 1750 a. C.; es decir, hace un poco menos de cuatro mil años. Sus leyes tienen algunas características principales: cuando no hay pruebas suficientes para declarar inocencia o culpabilidad se somete al acusado a un“ juicio de los dioses”; los delitos menores se basan
Ahora, en una comunidad pequeña se establecen vínculos muy fuertes entre sus integrantes – que a menudo son familiares –, pues cada miembro necesita a los demás para sobrevivir y el más pequeño conflicto puede perjudicar a la comunidad entera. Por eso las luchas son casi siempre contra personas ajenas a la comunidad, otras tribus, otras aldeas, con las cuales hay que competir por el alimento y
Eugenia, Sin título, linóleo, 6 / 6, 70 x 100 cm, 1992. Facultad de Artes, Colección de grabado