Agenda Cultural UdeA - Año 2000 OCTUBRE | Page 12

ISBN 0124-0854
N º 61 Octubre de 2000 sino , sobre todo , de ver de qué manera esa polémica toca a la cultura nacional en su diáspora , en su dispersión , en su condición de cruce de fuerzas que amenazan con dislocar cualquier proyecto social de aglutinación . Nuestra nación está llena de fundamentalistas dispuestos a desgarrar y a destruirse en nombre de utopías de diversa calaña . Aún no somos capaces de aceptar la inminente diversidad en medio de la cual un país vigoroso crece y nace a la urgencia de formas de comprensión más respetuosas .
El conflicto en el cual se debate la nación , las dos principales fuerzas que en él intervienen , parecen partir de una polarización que a su vez nace de dogmatismos profundos , arraigados y muy combativos . En un bando marchan quienes dicen defender una patria inefable , pesada como un basalto , leve como la gloria de una galería de héroes inciertos , pero diluida en historias manoseadas , en catecismos iracundos y en cartillas de Bruño ; y , en el otro bando , quienes con voluntad férrea y plúmbea , de todos los días contra todos los que se oponen , se ven entrando al palacio del
mando encarnando “ las leyes de la historia ”. No son fundamentalistas sólo quienes se reúnen a vociferar en la plaza pública queriendo imponer la lectura del texto bíblico que siguen fanáticamente ; también lo son todos aquellos cerebros rígidos que despliegan su dureza como dogmatismo e incapacidad para la atención al otro y , a su vez , nos quieren imponer una manera de mirar la hora actual , el horizonte y el futuro . Al contrario , si observamos la naturaleza misma de la comunicación y el carácter del lenguaje , descubrimos que él es lo común que se teje y crece desde la singularidad y permite , a su vez , la diferencia real , inconmutable entre los seres .
En esta dirección , la hermenéutica de Gadamer y Vattimo , y la analítica del ser ahí de Heidegger , confluyen en un punto : en el lenguaje nos encontramos como apertura de un mundo , pero también en el lenguaje “ resuena nuestra condición terrestre como mortalidad ”. Ni a las cosas mismas , ni al otro , accedemos de una manera directa ; de ahí la inutilidad y la violencia de tratarlas como si fueran objetos ; en
palabras de Vattimo , tendremos que “ encontrarlas en un juego del naufragio del lenguaje en el que el ser experimenta ante todo su propia mortalidad ”. El ejercicio más general que se propiciará será , pues , el pensar el lenguaje como ese espacio por excelencia en el cual se puede manifestar y realizar la diferencia y el genuino encuentro de nuestros límites . Se hará así visible la indudable urgencia de dialogar con toda la dimensión propia de la comunicación real , y el efectivo encuentro con el otro y con lo otro . Yo diría que este es el elemento central que en el fondo se juega en este tipo de posturas filosóficas y en su discusión abierta ; y lo más importante será cómo , desde esa discusión intelectual , examinemos las maneras de hacer filosofía actualmente . Creo que , sobre todo esto último permitirá examinar las implicaciones de las utopías que hemos ido adoptando , para descubrir la unidad imposible de sueños que se excluyen y continúan llevando a sus portadores a una confrontación interminable y de final incierto . Finalmente , lo más valioso , socialmente hablando , será descubrir , desde el terreno de las