Agenda Cultural UdeA - Año 1998 SEPTIEMBRE | Page 10

ISBN 0124-0854
N º 38 Septiembre de 1998 que brille e ilumine a todos los de la casa, no es justo que su enseñanza se circunscriba al área del aula, desperdiciando un elevado porcentaje del poder instructor de su doctrina. El pensamiento y la idea necesitan volar como el ave y correr como el viento, pero en la Universidad encontrarán la aceleración de la luz cabalgando sobre el electrón”.
Desde su nacimiento la Emisora se constituye en Voz de la Universidad. Proporcionando no sólo cultura y más cultura, sino reflejando la cotidianidad universitaria en campos como la investigación, la vida académica, el pensamiento o las manifestaciones artísticas. Y reflejando algo muy importante: la relación que ha tenido la Universidad con la comunidad en casi 65 años.
La Emisora, como el medio masivo de mayor cubrimiento y permanencia en la relación cotidiana de la universidad con la comunidad, refleja también sus encierros, sus olvidos frente a la acción que puede generar vida universitaria más allá de sus claustros. Pero, sobre todo, ha sido testigo del crecimiento y aporte de la Universidad en la vida del país.
Y testigo de la historia colombiana. Una historia conflictiva que se ha cruzado con la vida de la Universidad y, por supuesto, de la emisora. El 9 de abril de 1948, día del asesinato del caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán, los transmisores fueron apagados y se evitó que difundiera lo que estaba ocurriendo.
Tomas guerrilleras, dos cierres oficiales( uno de ellos por parte del entonces Gobernador de Antioquia, Óscar Montoya, en represalia por un programa sobre la masacre de las bananeras) y las voces de
polémicos protagonistas de la vida nacional, como Camilo Torres o Gonzalo Arango, e internacional, como Salvador Allende, muestran el vínculo vivo de la Emisora con la vida del país y del mundo.
Pero no sólo pasaron las voces polémicas. Los micrófonos de la emisora se abrieron para dejar fluir las pausadas voces de Jorge Luis Borges y Pablo Neruda, la encendida de Ernesto Sábato o la juvenil de Mario Vargas Llosa. Y las voces de los monstruos locales: León de Greiff, Ciro Mendía o Manuel Mejía Vallejo.
Capítulo especial merece el tema de la música. Desde la primera gran adquisición de 1.500 discos en 1945, con las grandes obras de los compositores clásicos, la Emisora Cultural de la Universidad de Antioquia ha tratado de mostrar las diferentes corrientes musicales de una manera pedagógica.
En 1945 era una verdadera novedad escuchar las sinfonías de Beethoven interpretadas por las escasas orquestas sinfónicas que existían en el mundo. Después fueron el jazz, el rack, la música contemporánea y experimental, tendencias que encontraron su sonido casi ideal en la banda de frecuencia modulada, reinaugurada en 1990.
La nueva frecuencia permitió un reordenamiento de la programación: las franjas musicales y literarias pasaron al P. M., mientras que la frecuencia de Amplitud Modulada se dedicó a nuevos programas de carácter social y educativo, propiciando mayores encuentros entre saberes y una proyección cada vez más sólida hacia la comunidad.
Siete años antes, en 1983, en la celebración del cincuentenario de la existencia de la