ISBN 0124-0854
N º 29 Noviembre de 1997 que es una combinación de cera de abejas y parafina. Una vez se seca la cera se retira la matriz y se prepara una mezcla de polvo de ladrillo y otros materiales arenosos, que son los apropiados para tomar la forma de la figura y recibir el bronce fundido. Ya seco el molde, se calienta lentamente desde 150 hasta 600 grados centígrados, con el fin de eliminar la cera y liberar el espacio cuya forma es la de la figura que se desea. En él se vacía el metal fundido y al secarse se obtiene la figura deseada.
Después continúa un delicado proceso de pulido del metal que es realizado por artesanos expertos, pues se trata de limar todos los defectos que pueda tener la figura, sin arruinarla. Para el acabado final se le da una pátina con ácidos que al reaccionar con el metal le dan determinado color y lo protegen de los estragos del tiempo y el ambiente.
Descrito, parece un proceso fácil, sin embargo, su dificultad depende de la complejidad, las características y el tamaño de la pieza. Lograr una buena obra depende de un sinnúmero de detalles: la obra del artista, de los artesanos, los cálculos en las mezclas de los metales, de las arenas, las temperaturas adecuadas y los tiempos entre otros factores.
La técnica de la cera perdida se utiliza también para elaborar elementos de alta precisión en aeronáutica, en la industria militar y en la Universidad de Antioquia el Grupo de Cera Perdida investiga acerca de la posibilidad de elaborar prótesis.