65LA CIUDAD DE LAS CASAS DE MADERA_1 | Page 18

ta las estrellas o mejor aún con la ayuda de un catalejo que fungía de telescopio .
A lo lejos en la costa las altísimas palmeras parecían sostener el universo .
En su navegar bordeando las costas pasaron frente a Jipijapa , y Salango donde se sorprendieron por el hermoso espectáculo de las ballenas que llegaban para el apareamiento .
Siguieron frente a Colonche , las tierras de Sumpa y Chanduy y a finales de 1531 , a su izquierda , tuvieron el acompañamiento alegre de los delfines en el golfo de Guayaquil .
Las aguas del río corrían como la tranquilidad continua de la existencia , más allá de la alegría y más allá del dolor .
El resto lo fue contando la historia . La expedición española , avanzaba hacia el sur y desembarcó en tierra firme para fundar en 1532 la primera ciudad española en la América del sur , bautizándola con el nombre de San Miguel de Piura .
En el camino constata que dos poderosos ejércitos incaicos se enfrentaban , disputándose el poder : Huáscar y Atahualpa .
Esta crisis social y política que afectaba el imperio era favorable a los planes de conquista española . El incario no podía presentar una defensa unida de su territorio y de su cultura .
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