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MERÇÉ SÀNCHIZ ESPAÑA
El 25 de diciembre, la mesa estaba preparada hacia el mediodía y no se recogía hasta la noche. Eran verdaderos festines, interminables y divertidos, porque, había mucha comida y bebida, porque, sobre todo los abuelos y abuelas, cantaban sus villancicos (“nadalas” en catalán) y porque, los nietos y nietas les pedían el “aguinaldo”, recitando una “décima” (pequeñas poesías o canciones), a cada uno de los comensales, fueran padres, abuelas, tíos, madrinas, etc. Realmente en catalán la palabra correcta es “estrenes”, pero se castellanizó y se quedó con aguinaldo.
Recuerdo con nostalgia que los barrenderos, los serenos, los carteros, los fanaleros, y muchas otras personas que realizaban tareas de servicio en las calles, también pasaban con tarjetas de felicitación con sus correspondientes “décimas” y petición de aguinaldo. Y también grupos de niños y niñas se paseaban por la barriada reclamando el aguinaldo al vecindario, cantando villancicos. ¡Eran otros tiempos!
La comida empezaba con el aperitivo: berberechos y mejillones en lata, patatas fritas, “llardons” (chicharrones), y si el presupuesto lo permitía, unas buenas gambas o langostinos a la plancha. El vermut a granel, de la bodega más cercana a la casa, era la bebida más tomada para el aperitivo, alguna cerveza, una copita de vino blanco…
A continuación, “l’escudella i carn d’olla” (cocido con pelota) no podía faltar: primero la sopa con su pasta llamada “galets”, una especie de caracoles enormes que llenaban el plato con cinco o seis unidades; luego las verduras, la carne, el pollo, la pata de cerdo, el jamón, los garbanzos con los que se había hecho la sopa y, lo que a mí más me gustaba la “pilota” (pelota), una gran bola de carne picada con ajo y perejil, que me hacía sentir que de verdad estábamos en Navidad.
Por supuesto, siempre había que poner en la mesa una buena ensalada que, por cierto, a mi madre siempre se le olvidaba, por lo que las risas eran enormes cuando al terminar de comer alguien se encontraba en la cocina la gran bandeja de ensalada sin tocar.
Escudella i carn d'ollla.