2 Generaciones Número 3 | Page 29

29

Testimonio

Ahora bien, he tenido largo tiempo para meditar en mi pasado de 66 años y en las cosas que he hecho y que he dejado de hacer y encuentro que Dios me ha bendecido de dos maneras: rescatándome de la muerte para darme una nueva oportunidad y así poder dar frutos buenos y, por otra parte, permitirme el tiempo para buscar el cambio de vida que debo tener. Porque dice un pensamiento: “si seguimos haciendo las cosas que estamos haciendo, como las estamos haciendo, obtendremos lo mismo que estamos obteniendo”. Y entonces, si yo pienso que no he realizado lo que debo de realizar, por lo tanto debo de cambiar.

Hoy observo al mundo desde otra óptica. Los seres humanos estamos dotados de sentimientos buenos y malos, pero como decía Salvador Borrego Escalante en su obra “Reflexiones”, el mal no existe. El mal es ausencia de bien. Entonces encaminémonos a buscar el bien común. ¿Cómo se logra esto? A través del AMOR. Si amamos a Dios, a nuestros semejantes y a nosotros mismos, la vida irá mejor. El amor es el máximo don que se nos da y lo único que se nos pide es que lo repartamos sin cesar.

Este es mi Testimonio y lo quise compartir contigo. Gracias por leerlo y que Dios te bendiga.