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¿Qué es un recuerdo? Es un archivo en nuestra memoria.
Nuestro cuerpo tiene memoria, nuestras células tienen memoria.
Un recuerdo es una experiencia que se ha vivido.
En nuestra mente existe un banco de recuerdos, por lo tanto tenemos tantos archivos como experiencias hemos vivido, unas a flor de piel y otras escondidas en el subconsciente.
Los recuerdos son una parte de nuestra vida, algunos positivos; felices, plenos y otros negativos de dolor, pena, sufrimiento.
Todos los seres humanos que vivimos de los recuerdos, y que traemos a la mente una y otra vez lo que nos ha pasado, sin darnos cuenta, estamos viviendo nuevamente ese recuerdo.
Nuestro cuerpo físico vuelve a sentir todo el dolor que en ese recuerdo hay; por eso volvemos a sentir el coraje, la decepción, la impotencia, el sufrimiento, la ira, etc.
Para la mente es como si lo volviéramos a vivir. Nuestra memoria trae el recuerdo y en ella se suceden internamente una serie de acontecimientos neuronales donde factores internos surgen como si en ese momento todo estuviera pasando en el presente.
Es como si todo el tiempo nosotros estuviéramos reviviendo el acontecimiento.
Para la mente no existe ni pasado ni futuro, pues cada vez que traemos un recuerdo de algo que nos pasó, lo vive y lo siente como si estuviera pasando en ese preciso instante, en el presente.
Pensemos un momento en el desgaste energético y emocional al estar repasando un acontecimiento una y otra vez y en lo que le está sucediendo a nuestro organismo.
Después de tener una confrontación con alguien uno se siente con una gran pérdida de energía y no solo eso, sino que además nuestro cuerpo físico se va enfermando por este desgaste. Debemos darnos cuenta que si ese recuerdo se está repitiendo constantemente esto se reflejara en nuestra salud.
Físicamente inicia con un dolor en alguna parte del cuerpo, como en la cabeza, después muscular y de ahí se aloja en algún órgano de nuestro cuerpo, que por mas medicamentos que tomemos no sanamos y, por consiguiente, hay que intervenir con una operación.
Todo por no reciclar nuestros recuerdos.
Cada vez que la memoria nos traiga un recuerdo de algún acontecimiento no nos enganchemos en él, o sea, no lo volvamos a vivir.
Para ir desarrollando la posibilidad de estar en el presente debemos trabajar en la respiración. Ésta debe ser completa, hasta el abdomen, con inhalaciones lentas y profundas, sin prisa, pausadamente. Inhalando por la nariz y exhalando por la nariz, una y otra vez.
Si la mente le trae un recuerdo y si usted está atento, dígale a la mente que no quiere ese recuerdo, que eso no está pasando ahora, que ya no lo quiere vivir nuevamente.
La mente es un instrumento, una herramienta, ella no decide por usted.
En un principio esto resulta difícil porque no estamos acostumbrados a mandar a la mente pero con el paso del tiempo esto se hará una realidad.
Tome su vida en sus manos, no viva más de recuerdos, manténgase en el presente y esto le permitirá ser feliz.
Mauricio Fernández
RECICLAJE DE LOS RECUERDOS