Digital publication | Page 84

Von Richthofen dirigía a una dotación de unos 5.000 hombres, la mayoría veinteañeros, que estaba al servicio del golpe de Estado de Francisco Franco contra la II República. Era un hombre culto, con inquietudes artísticas, y extremadamente metódico. No se saltaba sus ejercicios gimnásticos ninguna mañana y, por la noche, antes de dormir, acariciaba los aviones como si fueran su mujer.

Este alto mando militar alemán desarrolló su carrera en la sombra de su primo Manfred, el 'barón rojo'. Fue el más temido aviador en la I Guerra Mundial y se dice que derribó decenas de aparatos enemigos en combate. Wolfram 'sólo' tuvo siete derribos, según los datos recopilados por Gordon Thomas y Max Morgan Witts en 'El día en que murió Guernica', un libro de 1975 para el cual accedieron al archivo personal de la viuda de Von Richthofen y en el que colaboró Hans Asmus, su ayudante, casado más adelante con una mujer... vasca.

Este líder militar odiaba en secreto a los españoles para los que trabajaba. Detestaba su costumbre de saludar con contacto corporal y, especialmente, que no madrugaran. Entendía que cada mañana perdían un tiempo valioso para la guerra. Sólo admiraba a Juan Vigón, un militar algo mayor que él en 1937 y que era su interlocutor habitual en la campaña del Norte (Asturias, Cantabria, Bizkaia y Gipuzkoa). Conversaban en castellano, un idioma que dominaba con cierta fluidez.

Von Richthofen

El despiadado militar al mando de los nazis de Vitoria

Wolfram von Richthofen (1895-1945) representaba al ario perfecto. Era alto (aunque no demasiado) y musculado y tenía pelo claro y ojos azules, además de una nariz respingona característica de una familia aristocrática alemana como la suya. En 1937 se convirtió en jefe del Estado Mayor de la Legión Cóndor nazi en España, en el brazo ejecutor de Hermann Goering.  Él es el responsable directo del bombardeo de Gernika

84