ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 5 | Page 162

En el transcurso de esa década, la calçotada no sólo se fue encarecido ligeramente, también fue perfeccionando su protocolo y abriendo su círculo de invitados. Desde el primer momento contó con su propio programa y sus propias proclamas, como este gracioso y fascinante mensaje de apertura del año 1954 (traducido del catalán original, lengua que nunca se dejó de utilizar): “Año VII de la Fiesta de la Olla que se celebra en honor y gloria del Santo Calçot Virgen y Mártir, natural de Valls, el cual se conhorta de morir socarrado entre las llamas de los sarmientos por solaz y gourmandería de todos los calçotaires que somos Caballeros de la Orden de la Santa Salvitxada.” Y ojo con ésta última palabra, porque ya no se refiere a “la salsa especial de Valls” como hemos citado, sino que optan por llamarla “salvitxada”, que según el Corpus de la Cocina Catalana es una variedad lingüística más del romesco, pero que para algunos como la abajo firmante: no es igual. En todo caso, LA SALVITXADA ES PARA ALGUNOS UNA VARIANTE DEL ROMESCO Y PARA OTROS UNA COSA TOTALMENTE DISTINTA esa guerra ya la ganaremos en otro momento. Lo que está claro es que estas calçotadas que se llevaban a cabo en la Galia tarraconense no se hubieran popularizado sin la ayuda de forasteros “pixa-pins”. Los guiris somos así, andamos locos por el folclore ajeno para apropiárnoslo y emularlo aunque sea de forma patatera. La Penya de l’Olla invitaba a capitalinos de la ciudad condal, muchos de ellos ilustres artistas, escultores, historiadores, políticos, músicos…todo posible prescriptor era convocado y fomentaba posteriormente la divulgación del ritual (como hoy día, vamos). El interés generado produjo un efecto dominó en el sector de la restauración local que contagiaría al resto del territorio catalán hasta convertirse en motor económico, social y gastronómico. Aquella “colla” logró hacer historia. Amigos, tiempo, cocina y espacio. Una fórmula infalible de la cual puede, incluso, surgir hasta una revista.