ZOUK MAGAZINE (Versión en Español) NÚMERO 5 | Page 161

161 calçots se asaban solo en reuniones familiares, bajo un pretexto festivo, por lo que esta convocatoria sería diferente, no estaría supeditada al perímetro hogareño. Aquella primera calçotada tuvo lugar en una masia de la carretera de Montblanc y LA PRIMERA CALÇOTADA COMO RITUAL SOCIAL Y POPULAR TUVO LUGAR EN UNA MASIA CAMINO DE MONTBLANC EN 1946 congregó a jóvenes de Valls y Sant Sadurní d’Anoia, quienes, como era de esperar, aportaron champán por doquier (léase cava). Este grupo conformaría la consiguiente “Penya Artística de l’Olla”, agrupación definida ma- ravillosamente por Ventura como “humorístico-cultural-artística-gastronómica”, la cual establecería la anual “Calçotada de l’Olla” que sería culpable por completo de la popularización posterior. El menú primigenio ya marcaba las directrices de lo que hoy día se sigue respetando en casas, restaurantes y merenderos de música alta. Constaba de los calçots y su “salsa especial de Valls”, carne tierna (sic) de cordero y longaniza de Valls a la brasa con all-i-oli, pan de payés, vino de la Tierra (que por aquel entonces debía ser un tinto cargado de astringencia tánica), fruta como naranjas, dulces, champán, café y licores. Como mandan los cánones. El coste de la pionera fue de 35 pesetas (0,21€), mientras que la última que se celebró oficialmente en 1956 ya reclamaba 65 pesetas (0,39€).