DRA. HERMINIA PASANTES
CIENCIA
CONT...
desafortunadamente se refleja en las redondeces de la
figura, tenga una explicación, en parte, en el tipo de control
que la corteza u otras estructuras ejercen sobre los núcleos
del hipotálamo. No es tan descabellado suponer que la
afirmación popular acerca del buen carácter de los
gorditos tenga una base neurofisiológica a nivel del control
de los núcleos del hipotálamo, relacionados con la
regulación del apetito y con las distintas fases de la
conducta agresiva.
La extrapolación podría parecer bastante simplista, pero no
deja de tener su contraparte experimental cuando
sabemos que la administración de ciertas drogas, como las
anfetaminas, que precisamente actúan aumentando la
Figura I.1 Variedad de formas de las neuronas.
eficiencia de algunas conexiones neuronales del tipo de las
que se encuentran en el hipotálamo, da como resultado
una pérdida casi total del apetito, además de modificar
espectacularmente muchos rasgos del carácter del
individuo, como veremos en otros capítulos. El esquema de
que lo que consideramos una actitud emocional tiene su
asiento en el sistema nervioso, va cobrando así cierta
lógica.
Figura I.2. Mapa del homúnculo (hombrecito).
Área en la que se ubican las neuronas en la
corteza sensorial y en la corteza motora que
tienen bajo su control las distintas regiones del
cuerpo, la cabeza y las extremidades.
Figura I.4. A) localización del hipotálamo en el
cerebro. El hipotálamo forma parte de un conjunto de
estructuras cerebrales conocidas como sistema
límbico (punteado) que participan de manera
importante en la modulación de las emociones. B) en
el hipotálamo se encuentra una serie de núcleos
(grupos de neuronas) que tienen a su cargo funciones
relacionadas con la generación, supresión y
regulación.
Figura I.3. Áreas en la corteza cerebral donde
se localizan las neuronas relacionadas con
distintas funciones.