INCANDESCENCIA
Colaboración
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Dianna María Castañeda
(Tuxtla Gtz, Chis.)
IL SOLE
Para Argel Galindo
Queda en el silencio de la noche,
en los kilómetros que nos separan,
en los espacios vacíos de nuestras camas
la última mirada
Quedan nuestras flechas
y las piernas estiradas
a l c a n z a n d o el futuro
escrito en nuestras pieles:
morena, la mía;
la tuya, estrellada
Y los días trascienden,
lucho contra mis fibras
contra mi cuna.
Me dices que libere a los gatos,
me abres las puertas atascadas.
Tus besos me llueven en seco;
son mares, cascadas.
Más grandes que mi ego
son tus manos
que respiran luz nocturna
de luciérnagas.
Que me tocan, que me abrazan,
que me curan en densidad de arena
las heridas de la infancia
Te pido que no te vayas:
tu ausencia me queda en el cuerpo
como un brazo amputado.
Las horas se quedan frías,
mis imanes me piden
estar a tu lado
Es de lluvia y de cotorros
los sueños que nos abrazan
y fue el encuentro
para darnos cuenta
que juntos somos
Incandescencia.
LA MUERTE ESTÁ EN CASA
La muerte está en casa
Vestida de un negro suave
Reposada, descansando
Tierna, frágil, paciente
Tres veces al día se alimenta
De mis sutiles esperanzas
De mis inocentes alegrías
De mi más preciado tiempo
Hay entre las dos
El mejor secreto guardado
…un amor en crecimiento.
Durante su infancia tuvo afinidad por diferentes disciplinas artísticas, en especial por la literatura: gusto que la llevó a estudiar Lengua y Literatura en la Universidad Veracruzana en Xalapa, Veracruz. Escribió un par de libros de poesía en su adolescencia: He empezado a caminar(2010) y Olvida y regresa(2012), así como en gacetas de su ciudad natal y un par de cuentos infantiles en antologías nacionales. En su quehacer académico, ha podido acercarse a la traducción literaria, a la dramaturgia, al ensayo literario, a la gestión cultural y a la producción radiofónica.