Voational Training 1 | Page 41

A día de hoy somos muchos y muchas los/las jóvenes que reconocemos esta imagen. Quien no ha seguido el programa cada viernes en Cuatro, seguramente haya visto esporádicamente algún capítulo y sepa de qué trate.

Un programa que tiene como protagonista a un/a joven en cada capítulo que tiene problemas de conducta y que por diferentes circunstancias han acabado, en la mayoría de los casos, odiando a su familia y tratándolos como si fueran basura.

Aunque normalmente quien pide ayuda al programa son las familias de estos jóvenes, se han dado casos en los que son las propias amistades de las personas protagonistas las que la solicitan.

Es entonces donde entra el papel de Pedro García Aguado, un waterpolista de élite que perdió la oportunidad de seguir triunfando en el deporte por haber entrado en el mundo de las drogas.

El objetivo de Pedro es ayudar, mediante su experiencia, principalmente a esas personas jóvenes con problemas de conducta a cerrar las heridas que no terminan de curarse, las cuales no les dejan ser felices ni apreciar a la gente que tienen a su alrededor. Como consecuencia, favorece también al bienestar de las personas que conviven con el o la familiar protagonista del programa mejorando la relación y comunicación entre ambos.

Los y las jóvenes que aparecen en el programa, por lo general, ejercen violencia tanto física como verbal con los que viven en casa; son personas conflictivas, con necesidades básicas no cubiertas (sobre todo afectivas), que tienen en su pasado algún frente que no han sabido cerrar y les persigue afectando emocionalmente.

Pero estos casos no solo se dan en la televisión, pasan en la vida real. Fundación amigo realizó un estudio durante el 2015 en el que los datos señalan que en el País Vasco se abrieron 148 expedientes a menores por violencia filio-parental*, lo que supone el 3,02% del total de casos en España.