Vida Médica Volumen 71 N°2 - 2019 | Page 48

48 VIDAMÉDICA / FalmedEduca trata a las personas como un número o se vuelve cínico res- pecto a su trabajo por el distanciamiento mental, sin interés de realizar adecuadamente su trabajo. Finalmente hay una crisis de eficacia, porque no le encuentra sentido al trabajo y tampoco cree realizarlo exitosamente”, asegura. Estas condiciones sugieren que se puede asociar el burnout con alteración de protocolos, descuidos, etc., los que sumados, pueden producir eventos adversos. Sin embargo, si bien exis- te amplia literatura sobre la relación entre cansancio/sueño y errores, no es posible afirmarlo con certeza. El neurólogo es- pecialista en sueño de la Clínica Somno, Dr. Pedro Moya, cree que hay diferencia en los estudios porque no hay precisión en separar los significados de la palabra cansancio. “Una es ago- tamiento físico y necesidad de hacer reposo, a eso yo le llamo fatiga. Hay otro término que se llama somnolencia excesiva o hipersonmia que son ganas de dormir en horario de actividad que se puede reflejar en quedarse dormido en una reunión, en bostezar permanentemente o en que se caen los párpados”. Cuando existe somnolencia, las redes y conexiones entre las diversas zonas del cerebro para comunicarse y resolver pue- den estar a menos del 50%, si hay una carga de somnolencia donde la mitad de las neuronas necesitan entrar en un ciclo de regeneración, necesitan dormir, explica el experto. Si la per- sona no lo hace, afecta su capacidad de reacción, claridad de análisis y de toma de decisión. Dado el carácter intelectual del trabajo médico, a juicio del Dr. Moya, en los galenos se da más la somnolencia que la fatiga. “Si la persona ha hecho turnos, se ha privado de sueño, ha tomado un nuevo turno y ha pasado una semana haciendo rotaciones, está más predispuesta a equivocarse en test de concentración y de respuestas alerta y eso se podría reflejar en un error médico”. IMPACTO EN LA SEGURIDAD El investigador Frank McCormick y su equipo aseguraron en 2012 que los residentes de cirugía ortopédica estudiados estaban en alto riesgo de cometer errores médicos debido a la fatiga, pudien- do lesionar a sus pacientes o a sí mismos. En promedio dormían 5,3 horas, con niveles de fatiga y riesgo de error médico en un 22% en comparación con los sujetos bien descansados. En otra encuesta realizada a 1.412 médicos en período de formación en Nueva Zelanda, en 2007, el 30% reconoció un estado de somnolencia elevado y el 42% recordaba al menos un error clínico relacionado con la fatiga laboral en los úl- timos seis meses. El Dr. Prakash Gyawali lideró un equipo de estudio de la Escuela de Medicina de la Washington University. En 2011 observaron que por cada hora que pasaba había una reduc- ción del 4,6% en la cantidad de pólipos que identificaban los médicos. Como promedio, durante el duodécimo proce- dimiento del día, detectarían apenas algo más de la mitad de los pólipos identificados durante el primer control. HEMATOLOGÍA DEL HOSPITAL SALVADOR: TRABAJO EN EQUIPO El éxito de la Unidad de Hematología intensiva y trasplante progenitores hematopoyéticos del Hospital Salvador llevó al Ministerio en 2016 a ampliar la cobertura de pacientes, con la promesa de traer más personal especializado. Sin embar- go, la enfermera coordinadora de unidad, Gladys Álvarez, explica que ello demoró en concretarse. Entonces, comen- zaron a abundar las licencias y las peleas en el equipo de trabajo. También aparecieron los errores. “Pedimos ayuda a Recursos Humanos del Hospital y a la Asociación Chilena de Seguridad. Nos hicieron una encues- ta. De los 32 funcionarios, el 80% estaba mal psicológica y emocionalmente por sobrecarga laboral. Tuvimos problemas de desconcentración en el trabajo, porque luego de atender a los pacientes, hay que cambiarse de ropa, lavarse las ma- nos para pasar a otro paciente. Eso se hacía con rapidez en- tonces se infectaron algunos pacientes y esto empeoró más la situación”, relata. La crítica situación provocó el cierre de la Unidad. Sin em- bargo, comenzaron un programa para reponer al personal, abordando el problema desde lo administrativo y emocional. Álvarez recuerda que se realizaron talleres con psicólogos clínicos para saber qué era lo que le pasaba al equipo. En paralelo, el ministerio revisó y actualizó cargos, compró ser- vicios y finalmente lograron “retomar el funcionamiento de la unidad, esta vez con 6 camas y no 10 porque el personal contratado es para 6. La realidad actual es que los médicos generalmente descansan de noche, los enfermeros/as diur- nas solo trabajan de día y se desconectan del teléfono en la noche, salvo urgencias”. Los conversatorios continúan, con registro de un acta, para descubrir oportunamente alguna situación. La idea es evitar un nuevo quiebre en el equipo. LOS TURNOS DE LOS MÉDICOS GENERALES DE ZONA En una estrategia por entregar mayor dignidad a los pacientes en el Maule, entre 2015 y 2016 se realizó un trabajo conjunto entre la Agrupación MGZ local, Colegio Médico y Servicio de Salud del Maule. El Dr. Andrés Lagos, presidente local de los MGZ, explicó que ellos mismos plantearon que existiera turno Los enlaces en la cadena de error: tienden a ocurrir secuencialmente, pueden o no estar relacionados entre ellos y no ser aparentes para el operador.