Vida Médica Volumen 71 N°1 - 2019 | Page 31

VIDAMÉDICA / CULTIVO SEGURO forma contundente el beneficio de la cannabis para el alivio del dolor, tanto crónico como agudo. El efecto analgésico es muy marginal y los estudios que se hacen en grandes poblaciones de los derivados del cannabinoide, muestran que no hay un be- neficio superior. No son mejores que los analgésicos disponi- bles y avalados por el evidencia científica”. Igualmente el Dr. Carlos Ibáñez, de la Comisión de Psiquiatría de la Sociedad de Neurología, Psiquiatría y Neurocirugía de Chile (SONEPSYN), subraya que “no es lo mismo el dato anec- dótico de una persona que reporta sentirse mejor o estudios con muy pocos pacientes, sin un grupo control y a corto pla- zo, respecto de aquellos que cumplen con los estándares ne- cesarios de un estudio de buena calidad. Si existiera evidencia suficiente, ésta se debería presentar en el Instituto de Salud Pública (ISP) para que siga el conducto regular de cualquier fármaco y no pasar por el Congreso o modificar una ley”. Asimismo, Marcelo Pérez, director de alianzas estratégicas e incidencia de la Fundación Epistemonikos, detalla que “nuestro análisis, que es uno de los más grandes que se han realizado en el mundo y que cubre 82 patologías tratadas con cannabis en diferentes formatos, señala que por ningún motivo puede ser medicinal, porque la evidencia es muy baja respecto a los aspectos positivos, y sí están bien documentados los eventos adversos. Y si bien podría haber cierto beneficio, no supera los efectos negativos”. CONSUMO EN CHILE Y EFECTOS EN LA SALUD En 2018, el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), en- tregó el XII segundo estudio de Drogas en Población Escolar, realizado durante 2017. La muestra destaca que el consumo de marihuana supera el de cocaína y pasta base, y de los 55.803 alumnos consultados, 30,9% dijo haberla consumido durante el último año. El Dr. Zamorano recalca que los perjuicios a la salud son se- rios y en algunos casos irreversibles. “La evidencia científica disponible a la fecha, describe una serie de daños directos e indirectos del consumo de marihuana y sus componentes aisla- dos. Y estos son mayores en niños, adolescentes y personas con vulnerabilidad genética para trastornos psiquiátricos graves, como la esquizofrenia”. Además, enfatiza que los estudios demuestran que quienes { 31 inician el consumo antes de los 18 años tienen un mayores ries- gos de desarrollar un episodio psicótico, de dependencia y pro- babilidades de sufrir alteraciones cognitivas en la capacidad de atención, aprendizaje, memoria y funciones ejecutivas, incluso una disminución en el coeficiente intelectual en casos de con- sumo prolongado. POSTURA DE LA OMS En enero de 2019, Tedros Adhanom, director general de la OMS, envió una carta al secretario general de la ONU, António Guterres, con las recomendaciones de la 41º reunión del ECDD respecto a la revisión del nivel de control de la cannabis y sus sustancias derivadas, lo cual se votará durante el 62º período de sesiones de la Comisión de Estupefacientes (CND) que se reunirá en Viena, Austria, en el mes de marzo. Sin embargo, la prensa y los grupos pro cannábicos interpreta- ron que la OMS recomendaba cambiar el estatus de la cannabis y retirarla del listado de drogas peligrosas. No obstante, los ex- pertos aclaran que esa lectura es incorrecta. El Dr. Cuadrado señala que “es importante desmitificar lo que ha dicho la OMS respecto a la cannabis, la cual ha recomen- dado mantenerla en la lista I de sustancias narcóticas e incluir algunos de los cannabinoides derivados de la planta en la mis- ma lista. Este documento incluiye sustancias que son muy adic- tivas, como la cocaína y la heroína, por lo que hay un mito que se está tratando de instalar con esta recomendación de la OMS. Por otra parte, lo que sí dice y que hay una modificación es que hay una molécula que es el cannabidiol, que se deriva de la cannabis, que sería excluida de los controles internacionales de estupefacientes, debido a que podría tener un rol terapéuti- co en dos tipos de epilepsias refractarias que son el síndrome de Dravet y de Lennox-Gastaut, como tratamientos de última línea”. Sobre este punto, el Dr. Ibáñez explica que “éste es uno de los componentes de la planta, es el compuesto no psicoactivo, por lo tanto, no produce adicción. Sin embargo, el comité de exper- tos de la OMS no sugiere sacar de la lista de las drogas más adictivas al resto de los componentes, incluida la planta”. Finalmente, el Dr. Zamorano añade que se debe tener cuidado, “porque si bien es un error que parece conceptual, estas malas informaciones quedan en el conocimiento colectivo de las per- sonas y lleva a las personas a la confusión”. No estamos dispuestos a validar su uso en base a supuestos que no han sido probados El efecto analgésico es muy marginal. No es mejor que los analgésicos avalados por la evidencia La evidencia es muy baja respecto a los aspectos positivos y sí están bien documentados los eventos adversos Dr. Cristóbal Cuadrado Dpto. Políticas Públicas Colegio Médico Dra. María Antonieta Rico ACHED-CP Marcelo Pérez Fundación Epistemónikos