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y no tienes personal y no te queda más que cerrar pabellón
y se vienen los reclamos”, asevera.
“Las presiones por agilizar históricas listas de espera o las
urgencias en la atención, hacen que muchas veces las direc-
ciones de los hospitales permitan que médicos extranjeros no
acreditados puedan trabajar en anestesiología, sin tener la
formación adecuada, lo que rechazamos”, alerta el facultativo.
El profesional está consciente de la necesidad de aumentar las
medidas de seguridad para los pacientes. “Logramos tener un
médico en la recuperación. Los anestesiólogos creen que están
perdiendo el tiempo ahí, porque las autoridades te evalúan por
número de operados. Les importa un pepino que tú los hayas
operado en mejores condiciones”, critica.
Desde el Hospital de Urgencia Asistencia Pública, HUAP, el
Dr. Rodrigo Figueroa, jefe de la unidad de anestesia, comparte
el diagnóstico de lo que implica trabajar en anestesiología en
centros de referencia de alta complejidad.
“Por nuestra labor no estamos de punto fijo en la unidad de
recuperación. En caso de que un paciente sufra descompen-
sación o alguna emergencia de riesgo vital, si estamos de
forma simultanea recibiendo una urgencia que requiere una
atención en pabellón, no podemos estar en los dos lugares
al mismo tiempo. Y eso representa un riesgo latente que vivi-
mos cada día aquí en el hospital”, advierte el anestesiólogo
de la ex Posta Central.
LA BRECHA DE ANESTESIÓLOGOS
“Como Sociedad Chilena de Anestesiología
(SACh) hemos planteado a las autoridades
lo mismo que pide la Federación Mundial
de Anestesia a través de la OMS, es decir,
un anestesiólogo por pabellón, sin hacer
distingo para el sistema público y privado”,
afirma el Dr. Christian Nilo, past president
de la SACh.
El Dr. Nilo, con más de 20 años de ex-
periencia en la especialidad, destaca el
importante avance en superar la brecha
de especialistas anestesiólogos en Chile.
Mientras hace diez años la formación no
superaba los 24 anestesiólogos al año, ac-
tualmente se forman cerca de cien. “Uno
de cada diez especialistas es anestesiólo-
go. El último registro que nos entregó la
Superintendencia de Salud era de 1.544
anestesiólogos, y en abril 2018 se recibie-
ron 112 más. Es decir, actualmente calcula-
mos 1.656 especialistas”, sostiene.
Sin embargo, reconoce que aún no se cum-
ple la meta de un anestesista por pabellón.
“Estamos distantes de lo óptimo, básica-
mente por un tema de distribución. El sis-
tema público aún no cuenta con el número
suficiente de pabellones para responder a la demanda. Pero en la
mayor parte de los hospitales de alta complejidad esa norma se
cumple”, manifiesta.
El Dr. Nilo considera que las áreas de mayor riesgo en su es-
pecialidad se concentran en la anestesia de urgencia y en la
urgencia obstétrica. Este año acaban de reunirse con las autori-
dades del Minsal, el ministro Emilio Santelices y el subsecretario
Luis Castillo, ambos anestesistas, para avanzar en la materia.
“Junto al Minsal, hemos detectado que hay maternidades con
alto número de partos, que muchas veces exponen al anestesió-
logo a dos pabellones simultáneos. Estamos buscando que el
Ministerio se comprometa a tener un segundo anestesiólogo en
esas maternidades”, adelanta.
Destaca que mientras la brecha se mantenga, otorgar los estánda-
res de seguridad necesarios es un desafío pendiente. “No cubrimos
todas las endoscopias, no podemos hacer evaluaciones preanesté-
sicas en los hospitales públicos de la mayor parte de los pacientes,
no hay médico en las salas de recuperación en muchos hospitales
públicos. Eso en otros países ya es un estándar”, reconoce.
Sin embargo, existen iniciativas para mejorar la atención. El médi-
co anestesiólogo Dr. Germán Acuña, actual presidente del Consejo
Regional Concepción del Colmed, propone implementar policlíni-
cos de preanestesia, oportunidad para evaluar antes a los pacien-
tes y poder explicar los riesgos que conlleva el acto anestésico.
Esta medida es algo que ya se imple-
menta, por ejemplo, en la ex Posta
Central. El Dr. Rodrigo Figueroa releva
la importancia de aprovechar la instan-
cia para realizar un adecuado consenti-
miento informado.
“Hemos avanzado bastante en las ciru-
gías ambulatorias, citamos en un po-
liclínico varios días antes al paciente,
para mayores explicaciones. Si bien lo
anterior sirve para resguardarse de un
eventual conflicto médico-legal, el foco
está en el paciente y su seguridad. En
esa cita procuramos un consentimiento
Dr. Christian Nilo
informado que sea del acto anestésico
Past president de la SACh.
para explicarle al paciente todos los pro
y contra de la anestesia, las alternativas
“Como Sociedad Chilena
propuestas, cuál es su parecer, y si es
que entiende o no”, señala.
de Anestesiología (SACh)
No obstante, la mayor parte del tiempo
hemos planteado a las
se ven expuestos a pacientes de los cua-
autoridades lo mismo que
les no conocen sus antecedentes previos.
pide la Federación Mundial
“En esos casos, es fundamental de forma
posterior conversar con la familia para un
de Anestesia a través
llenado correcto de la información. Por
de la OMS, es decir, un
eso acá hacemos una revisión constante
anestesiólogo por pabellón,
de las fichas y supervisamos las activida-
sin hacer distingo para el
des docentes con los becados y todos los
sistema público y privado”
del staff”, agrega.