VIDAMÉDICA / COLUMNAS DE OPINIÓN
TRABAJO
COLECTIVO Y
SOLUCIONES DE
LARGO PLAZO
Dr. Rubén Quezada, Presidente Consejo
Regional La Serena
Los desafíos en salud deben analizarse con una política
de Estado, puesto que las medidas cortoplacistas han
demostrado ser inefectivas en solucionar los problemas
que vivimos día a día en la atención pública.
A pocos días de haber asumido un nuevo gobierno, se
logra apreciar cómo existe un giro en el funcionamiento
y prioridades del Ministerio. El cambio en el Protocolo
de objeción de conciencia, en el marco de la Ley de
Interrupción del Embarazo en 3 causales, se ha tomado
la agenda, demostrando la fragilidad de las actuales po-
líticas sanitarias, y poniendo sobre la mesa la necesidad
de contar con un hilo conductor que pueda generar un
desarrollo en salud, con diversos matices, pero que no
implique retrocesos en materia de discusiones país.
Temas como el financiamiento de la atención de salud,
la Tuición Ética de la profesión, la administración de
la Atención Primaria, el resguardo de los derechos se-
xuales y reproductivos, junto con asegurar condiciones
laborales y medioambientales saludables, son algunos
de los temas que deben ser abordados con un horizonte
común, correspondiendo a las autoridades políticas, so-
ciedad civil y organismos técnicos, la responsabilidad
de avanzar en soluciones concretas para un diagnóstico
que se torna evidente.
Creo importante destacar la forma de trabajo impul-
sada por el Colegio Médico en temas como el aborda-
je de las listas de espera por parte del Departamento
de Políticas Públicas y Estudios, y las Comisiones de
Infancia y de Género y Salud. La creación de equipos
con una agenda a mediano y largo plazo, abierta a revi-
siones profundas, y la elaboración de recomendaciones
en base a un trabajo colectivo, pareciera ser la manera
más apropiada de enfrentar los grandes desafíos que
han puesto a nuestro sistema de salud en el centro de la
discusión política habitual.
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DESDE LA ATENCIÓN
PRIMARIA HASTA LA
ALTA ESPECIALIZACIÓN
Dr. Antonio Orellana
Presidente de ASOFAMECH
Plantear prioridades en la atención en salud hoy por hoy resulta
difícil. Hemos sido testigos de los esfuerzos hechos en las últimas
décadas, construyendo nuevos hospitales y centros de salud, y tam-
bién hemos sido testigos de los esfuerzos realizados para contar con
el recurso humano que hasta el día de hoy sigue siendo deficitario.
Frente a esta situación, en primer lugar es necesario el entendimien-
to entre el ministerio y las instituciones que forman profesionales
en esta área, y que son las únicas autorizadas por ley para emitir
títulos profesionales.
Quizás sea necesario insistir en el modelo de redes integradas
de servicios de salud, basado en la atención primaria, con lo cual
podríamos establecer la eficiencia y la eficacia como principios a
cumplir, cuidando la calidad de la atención y muy especialmente la
satisfacción de los usuarios.
Sin embargo, debemos cuidar de dotar a la atención primaria de
todos los medios que la hagan resolutiva, tanto en el diagnóstico
como en muchos tratamientos. Su desarrollo debe estar a cargo de
médicos de familia.
El ordenamiento del sistema producto de estos cambios, podrá esta-
blecer una confianza de la población en lo que significa el cuidado
de su salud, que hoy debemos entenderla no como una ausencia de
enfermedad solamente, si no más bien como un estado de bienestar.
Así el médico de familia podrá enfrentar los cambios demográficos
y epidemiológicos que hemos vivido en las últimas décadas, y reci-
birá el reconocimiento de la población y de sus pares en lograr la
prevención y promoción en salud; dos elementos básicos para poder
pensar en un modelo a futuro.
Esto no significa disminuir la necesidad del especialista que Chile
precisa, pero es importante ordenar los requerimientos propios de
una población que deben ir desde la atención primaria hasta la alta
especialización.