Son las 10 de la mañana y el cielo gris
amenaza con ser un día lluvioso,
dificultando el iniciar las labores diarias de
todos. Fernando aun con el pesar de sus
55 años, luego de alistar todo lo que su
negocio requiere, sale de su casa como lo
ha hecho desde hace 30 años, empujando
su carro de mago biche desde el barrio
chico hasta el parque principal del
municipio de Soacha, recorrido que le gasta
cerca de unos 40 minutos a 50 minutos,
pues los baches en la vía, el atravesar la
Parque principal Soacha
autopista sur y los días lluviosos como el de hoy, dificultan el camino, haciendo que el recorrido sea cada vez
más demorado. Luego de llegar, instala poco a poco su puesto de trabajo, un poco molesto por las gotas que
mojan su cara al tratar de poner todo en su sitio pues al abrir el grande parasol azul y ubicarlo en su hueco co-
rrespondiente implica que miles de gotas caigan en su ropa. Sin embargo, nada parece sorprenderlo “Desde
que el día inicia así, uno ya sabe que las cosas se van a complicar, y esto no es nada, con estas lluvias se bajan
las ventas un montón y eso sí que me preocupa, aunque la ventaja es que con estos fríos la policía no se anima
a salir” expresa Fernando mientras limpia las go-
tas del mesón con un trapo seco. Ya ha pasado
cerca de una hora y media desde el momento que
Fernando salió de su casa, y con mucho entusias-
mo comienza a pelar la cascara de un mago, lue-
go que el fruto se encuentra desnudo, lo pone es-
tratégicamente en medio de una maquina que va
deshilachando el mango, hasta llegar al centro,
luego de tener todo en una vasija de plástico que
se encuentra debajo de la máquina, se porcionan
las hilachas de mango en varios vasos de plástico
y para mayor higiene se cubre el producto final
Fernando Gutiérrez, Vendodor Informal
con un plástico que asegura que la polución no
tocara el interior de ningún vaso.
“Existen varios tipos de mango biche, se tiene todas las opciones, dulce, salado, agridulce, inclusive muchos
piden con todo, una especie de revuelto de todo un poco, sin embargo eso no afecta el precio, pues este varía
según la cantidad de mango, los pequeños los tengo a mil, unos medianitos a mil quinientos y los grandes son a