19 Agosto 1962, Berlin
Me cuesta trabajo creer que en un par de días estarás leyendo
esto. Después de tantos intentos fallidos de comunicarnos,
lograr convencer a Eldwin de hacerte llegar esta carta durante
su guardia, fue un milagro. He pensado en intentar cruzar el
muro; sin embargo, lareciente noticia de Peter Fletcher
y su sangrientamuerte al intentar cruzar me ha
puesto los pelos de punta. Además dejar sóla a mi familia
no es una opción y estoy conforme con poder saber de
ti, por ahora. Pienso constantemente en todo lo que
vivimos juntos, aunque últimamente he pensado más en el
comienzo de todo. No te había hablado, no te conocía, pero te
habíavisto. Habíamos coincidido en la biblioteca más de
una vez e intentaba no mirarte fijamente, completaba mi tarea y
salía lo más rápido posible. Tú llegabas todos los días a la misma
hora y no tardabas mucho en salir, no había mucho tiempo y yo
quería verte más, quería conocerte.
Durante las dos semanas que me ausenté de la
biblioteca por mi suspensión de la escuela pensaba en ti
constantemente y cuando por fin regresé, me costó conseguir el
valor para acercarme. Un día, 27 de enero del 58 para ser exactos,
esperé a que salieras y ésa fue la primera vez que hablamos,
oincidimos en todas las opiniones y supe que todo marchaba
bien cuando te reíste de todos mis chistes, por malos que fueran.
A partir de ahí, todo cambió. Me sentía escuchado, comprendido.
Cambiaste mi forma de ver el mundo y por primera vez en lo que
parecían años, dejé de sentirme sólo. Sé lo cursi que me he de
escuchar y yo mismo me lo reprocho, pero no encuentro mejores
palabras para expresarme. Tengo tantas cosas que contarte y
preguntarte, pero lo más importante, recordarte que siempre
estaré aquí y sin importar el tiempo, nunca dejarás de ser quien
eres para mí.
Te extraño siempre, Luca.