Unidad 1-Hidrología para el manejo de cuencas UNIDAD-1VF | Página 5
determinan
la
capacidad
que
tiene
la
fuente
para
suministrar
la
demanda
de
energía,
analizan
las
magnitudes
de
las
crecientes
que
pueden
atacar
a
las
obras
civiles
y
cuantifican
los
procesos
de
sedimentación
y
determinan
las
condiciones
de
la
descarga.
• Limnología,
está
relacionada
al
estudio
del
agua
en
bofedales,
charcos,
lagos
y
lagunas,
aportan
datos
de
volúmenes,
variación
de
niveles
y
efluentes
para
su
aprovechamiento.
La
limnología
trata
de
la
descripción
y
análisis
de
las
características
estructurales
y
funcionales
de
los
sistemas
acuáticos
continentales
en
relación
con
los
factores
físicos,
químicos
y
biológicos.
• Control
de
avenidas.
Comprende
el
estudio
de
la
hidrología
relacionada
con
las
obras
y
acciones
encaminadas
a
impedir
los
daños
que
ocasionan
los
desbordamientos
de
aguas
e
inundaciones
que
causan
los
ríos
en
ciudades,
tierras
de
cultivos,
zonas
naturales
y
otras
obras
civiles,
se
denomina
también
el
estudio
de
riesgos
hidrológicos.
Control
de
la
erosión
hídrica.
En
este
caso
la
hidrología
provee
la
información
de
los
regímenes
de
las
lluvias
(intensidad,
duración,
frecuencia
y
tamaño
de
las
gotas
de
lluvia)
que
son
capaces
de
aplicar
su
energía
para
causar
desprendimiento,
desgaste
y
arrastre
tanto
en
los
suelos
como
en
los
cauces
del
río.
•
Consecuentemente,
sean
las
obras
para
el
aprovechamiento
del
agua
o
para
la
protección
de
su
comportamiento,
se
puede
considerar
que
los
métodos
de
la
hidrología
recolectan
y
procesan
información
histórica,
programan,
analizan
y
ejecutan
actividades
de
campo
en
topografía,
batimetrías,
aforos
líquidos
y
sólidos,
toma
y
análisis
de
muestras
de
agua
y
sedimentos,
entre
otros.
Los
resultados
de
éstos
producen
información
sobre
los
siguientes
aspectos:
• Características
climatológicas
y
morfométricas
de
las
cuencas
que
tienen
influencia
sobre
el
área
del
proyecto.
• Selección
y
capacidad
de
la
fuente
que
suministrará
el
ca udal
que
se
entregará
a
los
beneficiarios
del
proyecto.
• Magnitud
de
los
eventos
extremos
(Avenidas
y
sequías),
que
pueden
poner
en
peligro
la
estabilidad
de
las
obras
civiles,
o
a
los
procesos
de
navegación
o
el
suministro
confiable
de
agua
a
los
usuarios.