¿Cómo ha evolucionado el concepto de Virginidad?
Coloquialmente, se dice que una persona es “virgen” cuando no ha tenido aún relaciones sexuales. Es un concepto relacionado con la pureza y el honor, cuyo valor es apreciado desde la perspectiva cultural, religiosa y emocional en la sociedad. Con el paso del tiempo, el concepto de la virginidad ha ido evolucionando y contrastado distintas convicciones.
El origen de su importancia data desde el periodo primitivo, en donde las comunidades veían a la mujer como un “producto” dentro del comercio del trueque. La virginidad garantizaba que la “mercancía” estaba en buenas condiciones.
Las experiencias sexuales previas al matrimonio, eran muy mal vistas desde el punto de vista moral y religioso, e incluso ameritaba desprecio y castigo para las mujeres. Esto ocurre durante la época en la que el cristianismo poseía el poder y mando social, por lo que imponían la imagen de María como el modelo ejemplar a seguir.
La revolución industrial fue una época crucial en la modificación de la ideología social, en donde la mujer comenzó a liberarse de la tiranía y el dominio que el hombre ejercía sobre ella y comenzó a tomar control de sus decisiones, defendiendo los derechos que conlleva ser mujer. Entonces, el concepto de virginidad dejo de ser un término exclusivo de la mujer y se convirtió en un estado de trascendencia para ambos géneros. Se comenzaba a considerar que el ser virgen era una decisión personal más que una obligación.
Con el paso de los años, el concepto ha tomado diversos significados. Algunos consideran “ser virgen” el hecho de no haber tenido penetración durante una relación sexual. Para otros significa no haberse entregado sentimentalmente a la otra persona durante el acto, y hay quienes piensan que la virginidad es mental, no solo corporal.
Todo depende de los valores de cada individuo, de los que ha aprendido de su familia y de la trascendencia que para éste tenga. Sin embargo, el hecho de ser o no virgen ya no dicta si la persona es buena o mala, o si es apta para la reproducción o no. Es sólo una condición para decir si la persona ha tenido relaciones sexuales o no.