Sungmi Pessoa - 7.° grado
El Ángel de la Guarda
Análisis a partir del cuento de Mario Halley Mora 1
¿Tienes fe en el ángel de la guarda? Si no, ¿alguna vez la tuviste? Si tu
respuesta es sí, ¿por qué perdiste tu fe en él? Déjame contarte la historia de un
niño que un día perdió la fe en su ángel de la guarda. Es de un cuento llamado
El Ángel de la Guarda, escrito por el periodista, escritor, dramaturgo y poeta
paraguayo Mario Halley Mora.
El cuento comienza cuando un niño ve que su madre compró la pintura de
un ángel de la guarda para colocarlo en el dormitorio de su hijo. El ángel de la
pintura era hermoso, de bucles rubios, con larga túnica y rostro perfecto. Ob-
servando el cuadro, el niño empezó a preguntarse si el suyo también era así de
hermoso. Se acercó a sus padres y les preguntó cómo debería hacer para poder
ver a su ángel de la guarda. Ellos le dijeron que debía tener fe y rezarle cada
noche. No querían decirle que el ángel de la guarda era una fantasía, porque
todavía era un niño y no querían arruinar su infancia. Así que su hijo empezó a
rezar a su ángel de la guarda cada noche, para poder verle algún día. La gran fe
de este niño hacía que él se sintiera seguro y protegido. Un día el sueño de este
niño se hizo realidad. El niño se despertó en medio de la noche, y ahí estaba,
junto al pie de la cama, su ángel de la guarda. Tenía las grandes alas plateadas
plegadas detrás de los hombros. Su cabello rubio, caído sobre los hombros, los
ojos azules y una sonrisa tan buena como solo se la puede ver en el cielo. El án-
gel le contó cómo es el cielo, que Dios es un cascarrabias y muchas otras cosas.
A la mañana siguiente, en el desayuno, el niño fue contento junto a sus padres
y les contó todo lo que pasó. Lamentablemente, los padres reaccionaron de una
manera distinta a la que él esperaba.
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Travesía • revista estudiantil