TRABAJO SOCIAL | Page 54

54 personas se retiran del trabajo y se pueden reclamar determinados tipos de beneficios sociales, como las pensiones”.118 La vejez se tiende a definir en términos de edad cronológica por conveniencias estadísticas, al respecto debe señalarse que el Informe de la Asamblea Mundial del Envejecimiento, Viena, 1982, denomina Anciano a toda persona mayor de 60 años de edad. Por otra parte, Naciones Unidas (1956) adoptó el término “País envejecido” para designar aquellos países cuya población mayor de 65 años supera el 7 % de la población total. 119 El presente estudio considera el término Adulto Mayor para designar a las personas de tercera edad, fundándose en la premisa de Oscar Domínguez: “El término Adulto Mayor corresponde a una etapa de la vida, que en las condiciones actuales, dura más de veinte años”. Plantea importante la exigencia de llevar una vida activa e independiente durante la vejez. ¡Error! Marcador no definido.Y hace una reflexión sobre los distintos términos que se utilizan para denominar a los Adultos Mayores (y en ello el presente estudio concuerda con él), concluyendo que “el término Ancianidad sugiere cierta segregación que contraría los esfuerzos culturales para hacer de la vejez una etapa normal de la vida. Cristaliza, en cierta medida, un estado de pasividad y resignación ante lo inevitable, lo que repercute en la actitud negativa de los otros sectores frente a los problemas de la vejez. La expresión Senescente reproduce en forma mas atenuada los problemas de la palabra ancianidad. Implica una declinación progresiva e inevitable que dificulta el llamado a una vida activa en la vejez”. 120 Existen cinco características121 que permiten definir el envejecimiento: a) Es un proceso universal, ya que todos los individuos de la especie humana deben experimentar este fenómeno. b) Es irreversible, puesto que producido un cambio, este no retrocede, aunque puede lentificarse o acelerarse. c) Es acumulativo, sus consecuencias se van sumando unas a otras en el tiempo. 118 Guiddens, A. 1989. Arredondo, N.; 1990, p. 3. 120 Dominguez, O.; 1985. P. 7 - 8 119 121 Estas características han sido tomadas desde: Quesney, Francisco, 1988, p. 11.