PERSONAJES RELEVANTES
LAS CUADRILLAS DE "APAÑAORAS".
Nos ponemos en contacto con Dª Mª Gracia Domínguez que ha trabajado más de veinte temporadas como apañaora de castañas y nos cuenta que la temprada del apaño empieza a comienzos de octubre con las castañas tempranas y sigue a finales del mismo mes con el apaño de las tardías. Las herramientas que llevan las apañaoras nos dice que son una cesta mediana, una horquilla para apartar las hojas y unos guantes de goma. La jornada comienza a las nueve y media de la mañana y acaba a las cuatro y media de la tarde con una hora de descanso para comer. La duración de la temporada depende del número de campos que tenga el dueño y de cómo venga la cosecha. Cuando se acaba la temporada, “el acabo”, se suele celebrar invitando a la cuadrilla con mantecados, un licor y castañas asadas, los “calfotes”. Las castañas que se recogen se llevan a la Cooperativa de Los Marines y en algunos casos algunos las venden a intermediarios que vienen a las casas a acomprarlas. Algunas de las variedades de castañas que se cultivan en el pueblo son: helechosas, comisarias, de Alájar, monjas y anchas. Se van cogiendo del suelo una auna y se van echando en la cesta. Cuando la cesta está llena se vacía en un saco. Y cuando acaba la jornada se llevan a la Cooperativa. Dª Mª Gracia Domínguez concluye diciéndonos que el apaño es un trabajo muy, muy, duro pues tienes que estar todo el tiempo agachada y la espalda y los riñones duelen mucho. Y para el trabajo que es no está bien pagado.
Tras haber preguntado a varios vecinos y vecinas de la localidad nos cuentan que la época en que cae la bellota es en otoño, por “Tosantos”. En cuanto al tipo de bellota que prefieren los “cochinos” hay unanimidad en que a ellos les gusta más la de la encina por ser más dulce. Nos dicen que la raza de cochino que más se cría en el pueblo es la del ibérico negro, aunque hay algunos cruzados con Llense.
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El jamón de bellota es más jugoso que el de recebo, pues tiene una grasa especial que el de recebo no tiene. Los cochinos criados con bellota dan mejor jamón. Los de recebo se crían con pienso y son algo inferiores, aunque ambos son jamones extraordinarios. Cuando el otoño es bueno la bellota se cae por sí sola y no hace falta varear las encinas. Pero cuando no se cae entonces se hace necesario varear los árboles, a veces se aprovecha la que hay caída antes de varear. La mayoría de las personas entrevistadas se dedican a la cría del cochino casi toda su vida. Nos cuentan que actualmente no es rentable este tipo de actividad ganadera pues los cochinos los pagan barato y luego las carnes, chacinas y jamones los venden muy caro.