TOM SOWYER Tom Sawyer - Mark Twain | Page 61

Tom Sawyer www.librosmaravillosos.com Mark Twain Sabía muy bien la futilidad de contender con brujas; así es que desistió, desengañado. Pero se le ocurrió que no era cosa de perder la canica que acababa de tirar, a hizo una paciente rebusca. Pero no pudo encontrarla. Volvió entonces al escondite de tesoros, y colocándose exactamente en la misma postura en que estaba cuando la arrojó sacó otra del bolsillo y la tiró en la misma dirección, diciendo: -Hermana, busca a tu hermana. Observó dónde se detenía, y fue al sitio y miró. Pero debió de haber caído más cerca o más lejos, y repitió otras dos veces el experimento. La última dio resultado: las dos bolitas estaban a menos de un pie de distancia una de otra. En aquel momento el sonido de una trompetilla de hojalata se oyó débilmente bajo las bóvedas de verdura de la selva. Tom se despojó de la chaqueta y los calzones, convirtió un tirante en cinto, apartó unos matorrales de detrás del tronco caído, dejando ver un arco y una flecha toscamente hechos, una espada de palo y una trompeta también de hojalata, y en un instante cogió todas aquellas cosas y echó a correr, desnudo de piernas, con los faldones de la camisa revoloteando. A poco se detuvo bajo un olmo corpulento, respondió con un toque de corneta, y después empezó a andar de aquí para allá, de puntillas y con recelosa mirada, diciendo en voz baja a una imaginaria compañía: -¡Alto, valientes míos! Seguid ocultos hasta que yo toque. En aquel momento apareció Joe Harper, tan parcamente vestido y tan formidablemente armado como Tom. Éste gritó: -¡Alto! ¿Quién osa penetrar en la selva de Therwood sin mi salvoconducto? -¡Guy de Guisborne no necesita salvoconducto de nadie! ¿Quién sois que, que...? -¿... que osáis hablarme así? -dijo Tom apuntando, pues ambos hablaban de memoria, «por el libro». -¡Soy yo! Robin Hood, como vais a saber al punto, a costa de vuestro menguado pellejo. -¿Sois, pues, el famoso bandolero? Que me place disputar con vos los pasos de mi selva. ¡Defendeos! 61 Preparado por Patricio Barros