Para entenderlo mejor imaginemos que estamos escribiendo un documento largo, dividido en capítulos y queremos
que cada capítulo empiece en una página nueva. Así que hemos terminado el capítulo I y pulsamos cuatro veces la
tecla Intro, hasta que salte a la página siguiente para empezar el capítulo II.
Y continuamos…
Esta forma de proceder nos va a ocasionar muchos problemas porque si en alguna de las páginas anteriores
introducimos algún cambio, eso afectará a los párrafos vacíos, desplazándolos arriba o abajo y a su vez afectará a los
párrafos de las páginas siguientes y a todo el documento obligándonos a recolocar títulos, imágenes, etc. Es imposible
maquetar un documento de muchas páginas realizado con párrafos vacíos.
Word dispone de muchos recursos para maquetar correctamente un documento. En
lo concerniente al formato de párrafo es conveniente diseñar un estilo de párrafo normal para todo el documento. Lo
que recomiendo es seleccionar un párrafo, abrir el cuadro “Párrafo”, pulsando en la esquina inferior derecha del menú
herramientas de Párrafo. En este cuadro podemos elegir el tipo de alineación, las sangrías, el interlineado y el
espaciado de párrafo. En el recuadro “Vista previa” vemos cómo se va modificando el párrafo a medida que
añadimos opciones de formato.