España, como El Capricho( Comillas, Cantabria) o el palacio episcopal de Astorga y la Casa Botines( Castilla y León). La Sagrada Familia, tras 140 años de construcción, aún no tiene fecha final.
BARCELONA Y SUS ENCANTOS De Barcelona solemos hablar de la etapa modernista, también fue bastante fructífera su época medieval, ya que la ciudad se convirtió en un centro económico y político del mediterráneo occidental. Sin duda, se puede pasear por esa parte de la historia en el barrio Gótico, testigo del esplendor que vivió Barcelona desde el siglo XIII hasta el XV. Este barrio fue un importante centro de la población judía de la ciudad, que llegó a suponer un 10 % de la población total. El Eixample simboliza la perfección urbanística, también es un reflejo del momento de esplendor de la ciudad que ya antes hemos mencionado, que
tuvo lugar entre los siglos XIX y XX. Cuando la ciudad pudo crecer fuera de las murallas medievales, se ideó un plan urbanístico, capitaneado por el ingeniero Ildefons Cerdà, que diseñó una ciudad igualitaria, donde los barrios no se diferenciaban unos de otros y los servicios públicos se repartían uniformemente. Conocer el Eixample es conocer Barcelona, aquí se encuentran sus principales puntos turísticos, gran parte de la oferta gastronómica, de ocio y cultura, además de algunos de los mejores hoteles de Barcelona. Aquí también tiene lugar uno de los eventos más esperados del año, la feria del libro o Sant Jordi, el día del libro y la rosa. En el barrio de Sant Pere y de la época modernista, también está otra de las joyas más icónicas de la ciudad. El Palau de la Música Catalana fue construido entre 1905 y 1908 por el arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner como sede del Orfeó Català.