Existen rasgos morfológicos que se presentan en varias generaciones de
una misma familia, por ejemplo, el prognatismo o mandíbula saliente de los
Austrias que aparecen en todos sus retratos, o la nariz sobresaliente y
ganchuda de los Borbón de España.
Las mutaciones comprenden cualquier cambio en el material hereditario,
incluyendo las estructuras semi-microscópicas que forman a los genes.
Se supone que existen frecuentes mutaciones pequeñas en los genes sin
que se produzcan alteraciones fenotípicas, estas alteraciones generalmente
no se detectan, sin embargo, pueden influir en la selección natural y
presentar así un factor de evolución; pero además del proceso continuo
diferenciación existen “saltos” debidos a mutaciones considerables,
relacionadas con la aparición de grandes diferencias positivas o negativas
en los individuos.
VARIACIÓN NO HEREDITARIA.
Las mutaciones son naturales, cuando se presentan espontáneamente, pero
existen también mutaciones provocadas, artificiales o accidentales,
causadas por agentes físicos o químicos del medio, a los que se llama
agentes mutagénicos.
Entre los que se encuentran los rayos x, rayos gama, radiaciones
ultravioleta, irradiaciones de cobalto 60, altas temperaturas, diversos tipos
de radiaciones ionizantes. Algunos agentes químicos como el gas mostaza y
algunos derivados, el fenol, el metil-colantreno, el dibenzontranceno, et6c., y
hasta el formaldehído, tienen un ligero efecto mutagénico.
INFLUENCIA DEL MEDIO EN LA EXPRESIÓN DE LOS GÉNES.
Muchas son las anormalidades que se presentan en la especie humana,
causadas por genes mutantes, algunas son dominantes como la catarata, los
dedos fusionados y el enanismo acondroplástico; otras son rece