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INTERCAMBIO GASEOSO 253 Esta función alimenticia de la canasta branquial es compartida por todos los tunicados, otro grupo de animales no vertebrados del phylum Chordata. Muchos biólogos opinan que las branquias surgieron originalmente como estructuras filtradoras y que fue más adelante cuando adquirieron funciones respiratorias. Para mantener una capa de agua siempre fresca en contacto con las branquias, los peces primitivos nadan con rapidez. Este recambio del agua en contacto con las branquias es necesario porque el oxígeno que se disuelve en el agua es muy escaso. Algunos peces se asfixian si son inmovilizados. Casi todos los peces óseos realizan complicados movimientos respiratorios para forzar activamente el paso de agua a través del aparato branquial. Tales movimientos implican un complejo sistema de válvulas, modificaciones dimensionales de la cavidad bucal y apertura y cierre del opérculo (Fig. 19.3). En esencia, las branquias y los pulmones son evaginaciones o prolongaciones tisulares que incrementan la superficie respiratoria. Muchos peces tragan (degluten bruscamente) aire y absorben directamente el oxígeno jaseoso a través del tejido densamente vascularizado de la cavidad oral. Es muy probable que un ancestro pisciforme de los anfibios, reptiles, aves y mamíferos actuales haya adquirido evolutivamente un saco especial en la región faríngea (garganta) para retener el precioso aire. Con el tiempo, esa estructura debió convertirse en el ramificado aparato pu lmonar de los vertebrados avanzados. El pez pulmonado es un representante primitivo de un grupo de peces que adquirió pulmones a pesar de que dependía principalmente de sus branquias para el intercambio respiratorio. Los peces pulmonados viven en aguas estancadas de las regiones cálidas o en arroyos que se secan durante breves periodos. Sus pulmones, formados como evaginaciones ventrales del aparato digestivo, les sirven como un mecanismo complementario para obtener oxígeno durante los períodos difíciles. Por otra parte, los peces pulmonados pueden entrar en estivación, fenómeno parecido a la hibernación pero que ocurre cuando se presentan condiciones de aridez extrema. Estos animales construyen un capullo de lodo en torno a sí y duermen profundamente mientras pasa el período de sequía. En muchos peces óseos, además de las branquias existe un pulmón, aunque éste no tiene funciones respiratorias. Más bien se trata de un mecanismo hidrostático que permite al pez mantenerse a determinada profundidad en el agua. Dada su función, esa estructura se denomina vejiga natatoria. Si el pez desea ascender introduce aire en la vejiga natatoria (a través del torrente sanguíneo); por el contrario, para descender expulsa un poco de aire. Fig. 19.4 Aparato respiratorio humano. Los vasos dibujados en negro transportan sangre desoxigenada. (Tomado de Storer y cois.)