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ESTRUCTURA BÁSICA DE LA CIENCIA explicaciones no dinámicas de la especiación (diferenciación en nuevas especies) es el movimiento creacionlsta contemporáneo. Aunque no logró aceptación general sino hasta hace poco, el concepto de evolución no es nuevo; sin embargo, la comprensión del mecanismo de cambio evolutivo data apenas de poco más de un siglo. En 1801, Jean Baptiste de Lamarck propuso la primera explicación global del mecanismo de evolución. Lamarck creía que un organismo adulto adquiría nuevos caracteres (características) en respuesta directa a sus necesidades de supervivencia y que luego los transmitía a su descendencia. En la actualidad se sabe que la herencia se basa en los genes, de modo que los caracteres adquiridos no pueden pasar a los descendientes. Hoy se cree que el mecanismo de evolución fue la selección natural, concepto esbozado por Charles Darwin en su libro titulado On the Origin of Species by Means of Natural Selection (Sobre el origen de las especies por medio de la selección natural), publicado en 1859. En él presentó una convincente serie de argumentos en apoyo de la idea de que la evolución es el tema universal de la vida. Darwin no sólo tuvo la influencia de sus experiencias como naturalista (biólogo) durante el viaje de cinco años a bordo de la embarcación exploradora Beagle, sino también la de los descubrimientos de geólogos, economistas y hasta granjeros de su comunidad. La universalidad de la ciencia queda perfectamente ejemplificada con el logro conceptual de Darwin. La selección natural favorece la supervivencia de los individuos cuyas características les permiten adaptarse mejor a su ambiente. Hay ligeras variaciones entre los descendientes de todas las especies, lo que los hace un poco distintos a sus progenitores. Cuando una variación no favorece la supervivencia, los individuos que poseen esa característica no sobreviven hasta reproducirse o, si sobreviven, tienen poca descendencia. Así pues, la variación desfavorable acaba por desaparecer de la población. Por el contrario: si una variación favorece la supervivencia en determinado ambiente, los individuos que la poseen tienen mayores probabilidades de reproducirse y, por consiguiente, de transmitir esa característica a sus descendientes. Con el correr del tiempo, el carácter que favorece la supervivencia se vuelve parte de la población general. EJEMPLO 5 Los gibones son simios pequeños que pasan casi todo el tiempo en las copas de los árboles; sólo en raras ocasiones descienden al suelo, de modo que viajan por braqulación (balanceo de una rama a otra). Se alimentan del follaje y los frutos que encuentran en las copas de los árboles de su región de origen: el sureste asiático y el archipiélago malayo. Las manos de los gibones son largas y 3 huesudas, con pulgares muy cortos y delgados. Esta anatomía les permite afianzar con facilidad las ramas y colgarse de ellas, así como arrancar frutos y retoños. Sin embargo, se les dificulta recoger objetos que estén en una superficie plana (p. ej., el suelo) y carecen de otras destrezas manuales (a diferencia de los gorilas y ¡os chimpancés). El ambiente de los gibones no exige estas últimas características para la supervivencia. Puesto que descienden de un ancestro común a todos los simios, la anatomía de la mano de los gibones evolucionó gracias a la aparición fortuita de caracteres sobre los cuales actuaron las presiones de la selección natural de su ambiente: las copas de los árboles, un sitio donde la especie encuentra poca competencia por el alimento y enfrenta pocos amenazas por parte de depredadores. 1.4 ORGANIZACIÓN UE LA VIDA El estudio de la evolución es particularmente útil para dividir los organismos en grupos porque revela cómo esos organismos están emparentados cronológica y morfológicamente (es decir, por forma y estructura) entre sí. La clasificación de los organismos se denomina taxonomía. Los taxónomos utilizan las relaciones evolutivas para crear los grupos. Aunque los esquemas de clasificación son por necesidad un tanto arbitrarios, es probable que representen el "árbol genealógico" de las diversas formas vivas actuales. Cada organismo pertenece a uno de los cinco reinos. El reino es la categoría taxonómica más general. Esos cinco reinos son: Monera, Protista, Fungi, Plantae y Animalia. El reino Monera está formado por organismos unicelulares que carecen de núcleo y de muchas de las estructuras celulares especializadas llamadas organelos. Se dice que tales organismos son procariótlcos (pro = "antes"; karyon = "núcleo") y se trata de las bacterias. Los demás reinos están integrados por seres eucarlótlcos (eu - "verdadero"), cuyas células contienen núcleo y un repertorio más completo de organelos. Los eucariotes unicelulares pertenecen al reino Protista, el cual abarca los protozoarios y otros protistas vegetaloides y fungoides. Los organismos pluricelulares que producen su propio alimento están agrupados dentro del reino Plantae; las flores, los musgos y los árboles son ejemplos. Los organismos vegetaloides unicelulares y pluricelulares que absorben aumento de su medio pertenecen al reino Fungi, el cual incluye las levaduras y los mohos. Los organismos pluricelulares que deben capturar su alimento y digerirlo internamente se agrupan en el reino Animalia; las serpientes y los seres humanos son ejemplos.