Notas
La ordenación de las narraciones de Poe plantea un problema de gusto, pues aunque
cada cuento sea una obra independiente y autónoma, no hay duda de que todos ellos se
atraen o se rechazan conforme a ciertas fuerzas dominantes, a ciertos efectos
deliberadamente concertados, y a ese tono indefinible pero presente que conecta, por
ejemplo, relatos tan disímiles como Manuscrito hallado en una botella y William Wilson.
Por ello, y puesto que el lector tiende con lógico sentido a leer los relatos en el orden en
que se los presenta el editor, parece elemental publicarlos de la manera más armoniosa
posible, como, sin duda, lo hubiera hecho Edgar Poe de haber tenido tiempo y posibilidades
de preparar la edición definitiva de sus relatos. La mayoría de las compilaciones existentes,
sean completas o no, pe