han reducido su superficie, aumentando su profundidad.
El Lago Salado, con unas setenta millas de longitud y treinta y cinco de altura, está situado a
tres mil ochocientos pies sobre el nivel del mar. Muy diferente del lago Asfaltites, cuya
depresión acusa mil doscientos pies menos, su salobrez es considerablo, y sus aguas tienen en
disolución la cuarta parte de materia sólida. Su peso específico es de 1,179, siendo 1,000 la
del agua destilada. Por eso allí no pueden existir peces. Los que vienen del Jordán, del Weber
y de otros ríos, perecen en seguida; pero no es verdad que la densidad de las aguas es tal, que
un hombre no pueda sumergirse.
Alrededor del lago, la campiña estaba admirablemente cultivada, porque los mormones
entienden bien los trabajos de la tierra; ranchos y corrales para los animales domésticos,
campos de trigo, maiz sorgo; praderas de exhuberante vegetación; en todas partes setos de
rosales silvestres, matorrales de acacias y de euforbios; tal hubiera sido el aspecto de esa
comarca seis meses más tarde; pero entonces el suelo estaba cubierto por una delgada capa de
nieve que lo emblanquecía ligeramente.
A las dos, los viajeros se apeaban en la estación de Odgen. El tren no debía marchar hasta
las seis. Mister Fogg, mistress Aouida y sus dos compañeros tenían, por consiguiente, tiempo
para ir a la Ciudad de los Santos, por un pequeño ramal que se destaca de la estación de
Odgen. Dos horas bastaban apenas para visitar esa ciudad completamente americana, y como
tal, construida por el estilo de todas las ciudades de la Unión; vastos tableros de largas líneas
monótonas, con la tristeza lúgubre de los ángulos rectos, según la expresión de Víctor Hugo.
El fundador de la Ciudad de los Santos, no podía librarse de esa necesidad de simetría que
distingue a los anglosajones. En este singular país, donde los hombres no están, ciertamente, a
la altura de las instituciones, todo se hace cuadrándose; las ciudades, las casas y las tolderías.
A las tres, los viajeros se paseaban, pues, por las calles de la ciudad, construida entre la
orilla del Jordán H\