2. Capacidad: No es suficiente con poseer una habilidad. Hay que ser capaz de convertirla en valor. ¿ A cuánta gente inteligente y con aptitud conoces que no rinde a la altura de las expectativas ante un cliente? ¿ O que falla estrepitosamente en inteligencia emocional? Se puede ser muy listo para identificar una oportunidad de negocio pero muy tonto para negociar. No es suficiente ser hábil haciendo algo mejor que el resto. Hay que saber sacarle partido a esa habilidad.
3. Actitud: Entendida como resultado de voluntad y motivación. Se puede poseer una habilidad y la capacidad para convertirla en valor y, sin embargo, no hacerlo. Además de saber sacar partido a las habilidades, hay que demostrarlo. Si el talento no se expresa, entonces no es talento. Por eso la actitud es el factor más crítico. En situaciones en las que las habilidades y capacidades son muy parecidas, lo que marca la diferencia en cuanto a talento es siempre la actitud.
4. Contexto: El talento, para expresarse, necesita que se cumplan condiciones externas determinadas. Necesita un tipo de espacio para desarrollarse con independencia y autonomía necesaria.
Algo que debemos saber es que hablar de talento también supone autoconocimiento. Como colaboradores, si pretendemos alcanzar el éxito, necesitamos autoconocimiento a tal punto de identificar nuestras propias habilidades, saber expresarlas y demostrarlas, y saber dónde desarrollarlas, de manera que mi talento se vea reconocido, generando además, mi bienestar integral. A la vez, es necesario identificar nuestros puntos de mejora, tener la actitud y disposición para cambiar y evolucionar, y para adaptarnos al cambio.
Hacer algo bien, a tiempo y con calidad, no es talento, es eficiencia. No debemos confundir hacer un buen trabajo con talento( error clásico). Un buen trabajador es el que desempeña su tarea, de acuerdo a unas instrucciones y unos estándares de calidad, en un plazo determinado. Talento es quién aporta valor al resultado de lo que hace aplicando una especial combinación de habilidades, capacidades y actitudes en un contexto determinado.
10
2. Capacidad: No es suficiente con poseer una habilidad. Hay que ser capaz de convertirla en valor. ¿ A cuánta gente inteligente y con aptitud conoces que no rinde a la altura de las expectativas ante un cliente? ¿ O que falla estrepitosamente en inteligencia emocional? Se puede ser muy listo para identificar una oportunidad de negocio pero muy tonto para negociar. No es suficiente ser hábil haciendo algo mejor que el resto. Hay que saber sacarle partido a esa habilidad.
3. Actitud: Entendida como resultado de voluntad y motivación. Se puede poseer una habilidad y la capacidad para convertirla en valor y, sin embargo, no hacerlo. Además de saber sacar partido a las habilidades, hay que demostrarlo. Si el talento no se expresa, entonces no es talento. Por eso la actitud es el factor más crítico. En situaciones en las que las habilidades y capacidades son muy parecidas, lo que marca la diferencia en cuanto a talento es siempre la actitud.
4. Contexto: El talento, para expresarse, necesita que se cumplan condiciones externas determinadas. Necesita un tipo de espacio para desarrollarse con independencia y autonomía necesaria.
Algo que debemos saber es que hablar de talento también supone autoconocimiento. Como colaboradores, si pretendemos alcanzar el éxito, necesitamos autoconocimiento a tal punto de identificar nuestras propias habilidades, saber expresarlas y demostrarlas, y saber dónde desarrollarlas, de manera que mi talento se vea reconocido, generando además, mi bienestar integral. A la vez, es necesario identificar nuestros puntos de mejora, tener la actitud y disposición para cambiar y evolucionar, y para adaptarnos al cambio.
Hacer algo bien, a tiempo y con calidad, no es talento, es eficiencia. No debemos confundir hacer un buen trabajo con talento( error clásico). Un buen trabajador es el que desempeña su tarea, de acuerdo a unas instrucciones y unos estándares de calidad, en un plazo determinado. Talento es quién aporta valor al resultado de lo que hace aplicando una especial combinación de habilidades, capacidades y actitudes en un contexto determinado.
Y tú … ¿ tienes talento?
10
Jessica Torres Frías Analista Sénior de Desarrollo Humano