TALENTO JUL-AGO 2018 talentoJUL2018 | Page 17

La reflexión es un proceso cognitivo personal. Cuando una persona -el Mentee en este caso- reflexiona, elige una experiencia, propia o ajena; la interioriza en su mente, la conecta con otras experiencias y la filtra con sus propios sesgos. Cuando el resultado de este proceso genera un aprendizaje, el Mentee desarrolla una for- ma de responder al mundo que es diferente de la que poseía antes de realizar la reflexión. El aprendizaje es, por tanto, la creación de significado a partir de las experiencias pasadas o presentes, y sirve como guía para conductas futuras. Bpoud y Col (1985) señalan que la reflexión es también una experiencia, no es un fin en sí misma. El propósito de la reflexión es pre- pararnos para una nueva experiencia. Una manera nueva de hacer algo, aclarar un asunto, desarrollar una habilidad o resolver un problema. Hemos constatado la prevalencia en el entorno organizacional de la creencia erró- nea de que el saber -la información- es, o debería ser, suficiente para hacer, lo que en el caso de las soft skills es absolutamente falso. Conclusión Las malas noticias son que la efectividad de los procesos que se desarrollan en la actualidad en este país es entre baja y muy baja y, obviamente, las muy buenas noticias son que esa efectividad tiene un margen de mejora entre enorme y colosal. La metodología que diseñamos en IMS, y mejoramos continuamente, se denomina Effec- tive Mentoring® porque entendemos que el propósito número uno de tu empresa es dar beneficios. “No soy un maestro, sino un despertador.” – Robert Frost