ESPACIO REFLEXIVO
EMOCIONES
analices y trates de recordar una eta-
pa en tu vida en que no te sentías así
y recuerdes quién eres en realidad, y,
en lo más profundo de este miedo que
te lleva a sentirte enojado y deprimido
seguramente hay una idea preconcebi-
da del mundo y del “deber ser” que te
hace sentir terriblemente mal, no sola-
mente te juzgas severamente, sino que
también te culpas y te atormentas. Pa-
radójicamente tu gigantesco ego no te
deja ni comprenderte, ni perdonarte.
Es momento de soltar y perdonarte, ne-
cesitas dejar atrás todas las ideas de lo
que debería estar pasando y hacer con-
ciencia de que seguir por este camino
sólo te está llevando a tu destrucción,
empieza por reconocerte y aceptar este
Deja de poner tus
ojos en todo lo que no
está funcionando en tu
mundo y agradece lo
que sí tienes.
principio de realidad. Deja de poner tus
ojos en todo lo que no está funcionando
en tu mundo y agradece lo que sí tie-
nes. Definitivamente hay un asunto que
está pendiente contigo mismo, no con
los demás. Pregúntate en qué momento
empezaste a sentirte así y date la opor-
tunidad de empezar de nuevo.
Hoy que estás leyendo estas líneas es
el momento perfecto para recuperar tu
vida. ¿Quieres ser feliz y encontrar tu
plenitud? ¿Qué esperas?
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EL GUIÓN
Todos tenemos nuestro guión de vida como un libreto secreto,
guiones que van pasando de generación en generación y se mani-
fiestan en el sistema familiar; son como modelos ciegos de identi-
ficación que nos hacen muy pertenecientes a nuestra familia y que
sólo puede ser modificado si se traen a la luz, si se pueden ver. Y
cuando se ven, se escapa de la inocencia y de las culpas, pasa por
la absoluta decisión que toma el ser adulto.
¿Qué es más importante para mí; mis ideales o seguir pagando
deudas que ya están pagas? ¿Qué es lo que más me importa; mis
sueños, mi propia vida, mi salud, mi bien-estar, mi abundancia?
Por lo tanto, ¿Qué soy capaz de sacrificar…?
Poder ser leal sin necesidad de partirme en veinte pedazos, sin
necesidad de sacrificar mi decisión de ser feliz de una buena vez,
agradecer a todos mis ancestros que me trajeron hasta aquí, por
ellos, hoy estoy en esta vida.
Pero llega un instante, un momento en el que decido: ‘ahora me
toca a mí hacer algo diferente’. Después de todo, la mayor lealtad,
no es pegarse a viejas deudas que ni siquiera son mías, la mejor
lealtad, es hacer algo lindo y bueno con nuestra propia vida.
¡Ahora me toca a mí! Y yo como adulto decido como quiero vivir.
La vida es corta, pero bien vivida alcanza.
Por: Marcelo Brosky
Apasionado , disfrutador y dueño de mi vida Elijo y decido ser feliz todos los días.
Coach Ejecutivo y Equipos de trabajo.