Suave como la lluvia - Miguel Rubio - teaser | Page 15

20 Miguel Rubio
puesto una cuidadora y se pasaba todo el tiempo detrás de la barra . Llegué a pensar que el hombre no dormía o lo hacía allí tirado , en cualquier rincón , mientras la tristeza y el hastío se clavaban en su cara en forma de profundos surcos .
Los cuatro fantásticos . Los inseparables . Cuatro vidas tristes , grises y vacías . Cuatro vidas tiradas a la basura que el marido de Eva podría haber recogido en uno de sus contenedores . Claro que nadie habría pagado por eso .
De modo que decidí que seguiría igual el tiempo que me quedase . Continuaría con mi rutina . Paseo , televisión , lectura , el bar de Paco por las tardes y , eso sí , cuando llegase el momento y las cosas se pusieran feas de verdad , yo mismo me quitaría de en medio , como hizo el marido de Eva . Solo que , en vez de colgarme del cuello , utilizaría la semiautomática del viejo que todavía conservaba , una Walther PPK que supuestamente le regaló un alemán que le debía algún favor . Mi padre había sido policía y le gustaba hacer favores a la gente del barrio . Le hacía creer que así le respetaban , que estaban en deuda con él . Pero ni los que podían deberle favores ni él estaban ya , y el barrio hacía mucho que tampoco era el mismo .
No , ningún santo vendría a salvarnos como en la canción y , desde luego , no esperaría a ver cómo la vida se me escapaba sin hacer nada . Esta vez no . Al menos me permitiría decidir la hora final .