que eras hace 7 años estaría orgullosa de ti ahora mismo. Te conoces y solo te queda
disfrutar.
No me voy a demorar más, creo que es suficiente. Buenas noches diario, mañana te haré
saber con detalle qué tal el carnaval.
13 de febrero, 2015
Las 4 de la mañana, por Dios, el peor sueño de mi vida. Te perdía, lo vi. Sentía
impotencia, la impotencia que se siente al no poder hacer lo que deseas, cogerte y no
dejarte escapar. “No te vayas”, mi última frase que se ahogó en un sollozo. Que alguien
me pellizque, lo necesito. Giras esa esquina y, desapareces. Corro, incluso vuelo y al
mirar no estás. Te había perdido para siempre. De golpe, desperté. Mi cara era un
completo mar de lágrimas. Cómo una criatura que tan solo lleva 4 años en este mundo
puede ser tan pequeña y a la vez hacerte sentir cosas tan grandes. Volví a dormirme.
Carnaval. Sí, hoy es el día, mi queridísimo carnaval. Una esencia compuesta de
maquillaje y nervios, muchos nervios, ha invadido el instituto. No hemos ganado nada
pero tampoco hemos perdido gran cosa, el esfuerzo y la voluntad por hacer que saliera
lo mejor posible siempre es lo que realmente importa. La intención es lo que cuenta
como seguramente dijo algún sabio ¿no? He pasado la tarde con mis amigas y hemos
hecho muchas fotos que quedaran ahí para el resto de los días. Pienso que la amistad es
muy bonita. Cuando sea una anciana miraré atrás y me daré cuenta de las ganas
inagotables que teníamos de crecer, de salir por ahí pintadas, peinadas y con los tacones
más altos. También me daré cuenta de que todo pasa y cambia, que lo que realmente
importaba era disfrutar, había que disfrutar aquellos años de locura. Por eso ahora ríe,
baila, sal por ahí y aprovéchate de los días que te pertenecen antes de que sea demasiado
tarde. La muerte está tan segura de ganar que te da toda una vida de ventaja, vívela lo
mejor que puedas y sobretodo rodéate de tus seres queridos. La vida en compañía es un
millón de veces más bonita.
14 de febrero, 2015
Me he dado cuenta de eso que dicen, ni el viernes 13 es tan malo, ni el 14 de febrero tan
bonito. San Valentín, no sé para qué sirven estas fechas señaladas, motivos tontos para
intentar demostrar tu cariño, algo que se debe manifestar cada día. Señalamos fechas
para justificar acciones, pero las acciones se justifican con sentimientos. Perdemos la
sinceridad al hablar de ellos. Pero aún así vivimos, entre excusas y disculpas, entre odio
y envidia, entre cariño y amor, entre cada rincón de corazones no correspondidos, al
tiempo que originamos heridas que solo se cosen con las agujas del reloj.