Skapa't | Page 19

Racó literari HISTORIA DE UNA ASESINA Un día Anaïs se encontraba en el patio del colegio, de pie bajo un árbol, cuando, de pronto, notó algo que le rodeaba el cuello. Era una cuerda con un nudo corredizo que alguien había dejado caer desde arriba. La chica miró hacia el cielo y vio a alguien sentado en una de las ramas del árbol; pero no pudo verle la cara. Sintió que la cuerda cada vez le apretaba más y, en un momento dado, el atacante tiró de ella. Quería ahorcarla. Y lo habría conseguido de no ser porque los reflejos de Anaïs eran más grandes que los de una mangosta (ya sabéis, ese animal que está entre el hurón y el gato), y tuvo tiempo de aflojar el nudo antes de que le robara la vida. Muchos profesores y alumnos presenciaron lo ocurrido, pero nadie hizo nada para evitarlo. “Por fin se va a hacer justicia por la muerte del pobre Luis” debían de estar pensando. Pese a eso, la muchacha siguió con su vida normal. El intento de asesinato por parte de una persona sin rostro no le causó traumas ni secuelas (bueno, le salieron un par de moratones que le duraron unos días), y decidió olvidarlo. Pero Olivia y Ángel no podían. Casi matan a su hija, y no podrían haberlo soportado. No intentéis adivinar lo que va a pasar a continuación, porque es matemáticamente imposible. Jamás se os ocurriría. No vais a saber cómo acaba la historia hasta que yo os la explique, porque hay relatos tan escalofriantemente terroríficos que es imposible adelantarse a las palabras del escritor. Es decir, en este caso, una escritora. Juntos, por primera vez, decidieron ponerle remedio. Con los nervios a flor de piel, pidieron a las tres niñas que se hiciesen ellas la cena, porque ellos estarían ocupados hablando durante un buen rato. Este