Desde épocas inmemoriales el hombre siempre ha cuestionado todo lo que le rodea. Algunas de estas cuestiones eran y son la búsqueda del porqué de las cosas, es decir, su origen. Cabe destacar que la raza humana, gracias a su extraordinaria inteligencia, ha llegado a responder a alguna de ellas. Pero la pregunta que aún está por responder es el origen del hombre y, por supuesto, cómo se llegó a formar el Big Bang que desencadenó la formación del universo. Estas preguntas, de momento, solo se responden a través de la religión como método en el cual encontramos la respuesta al origen: Dios.
Si echamos la vista atrás, exactamente dos siglos, apreciamos el resurgir de una forma de pensar racional, que quedó varias veces excluida por herejía, ya que provocaba muchas diferencias con la religión : la ciencia. Específicamente, en el año 1871, un científico expuso su punto de vista acerca del origen y la evolución del hombre en su libro llamado El origen del hombre. Él era Darwin, que sin más prejuicios dio a conocer sus estudios, sin pensar en lo que diría y cómo reaccionaría la sociedad religiosa. Por ese motivo, actualmente, tanto la religión católica como otras religiones tachan esta teoría como blasfemia. De esta manera, podemos apreciar el papel y la fuerza que juega la religión en nuestra sociedad, sobre todo la cristiana, que durante esa época y en épocas anteriores no era del todo benévola. Pero por todo esto no debemos pensar que las religiones reprimen a las personas, sino más bien dan esperanza a todo aquel que la necesita.
La religión, en general, es un término bastante subjetivo, en el que cada uno puede tener su propia opinión al respecto. Muchas veces las ideas sobre la religión se ven influenciadas por factores que nos rodean, como los medios de comunicación, la familia y los amigos, principalmente. En resumen, si indagáramos de una manera u otra podríamos encontrar el verdadero origen de las religiones y su verdadero fin, que es, según mi opinión, fomentar la expansión del bien en la sociedad actual.
Adam Kandy Monzonís
2º de Bachillerato A
La religión y su causa-efecto a lo largo del tiempo
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